CARTAGENA. El gran contrato de mantenimiento de litoral para los próximos tres años, más dos prorrogables, y que tiene una cuantía inicial de 2,7 millones de euros, se ha puesto en marcha con el anuncio de las condiciones del mismo.
El gran apartado se encuentra en la retirada de biomasa, una de las grandes preocupaciones actualmente en la costa sur del litoral cartagenero y que ha provocado un alarmante deterioro costero. Un informe emitido por departamento de Planificación Ambiental del área de Urbanismo del Ayuntamiento de Cartagena indicaba hace tan solo un par de meses que había que proceder de manera inmediata a la retirada de la biomasa vegetal en descomposición acumulada en el borde litoral del Mar Menor. Añadía el mismo que, debido a la entrada de agua con nutrientes desde la cuenca vertiente, tanto superficial como subsuperficialmente por muchas zonas de playa del perímetro lagunar, se podía observar el "estado crítico del ecosistema, con grave riesgo de crisis distróficas y eutrofización".
Días más tarde, era la propia alcaldesa, Noelia Arroyo, quien añadía que no es solo la limpieza, "la imagen de ver las playas así o los problemas sanitarios que puede originar a los usuarios. Este asunto debe formar parte de las estrategias de protección del Mar Menor". Recordó que en agosto pasado se retiraron 120 toneladas de biomasa de la costa, por lo que avisaba que es una preocupación "permanente y estructural", a la vez que pedía ayuda para financiar el proyecto de limpieza.
Este contrato, denominado 'Mantenimiento y conservación de las infraestructuras turísticas del litoral de Cartagena', se divide en tres capítulos y dos lotes.
Los dos primeros capítulos forman parte del primer lote. El coste anual del mismo es de 800.000 euros y los trabajos que se llevarán a cabo son los de mantenimiento y conservación de las zonas del litoral que comprenden las poblaciones del Mar Menor y la zona Oeste: Playa Paríso, Playa Honda, Mar de Cristal, Islas Menores, Los Nietos, Los Urrutias, Punta Brava, El Portús, La Azohía e Isla Plana. Parte de los trabajos consisten en el montaje, mantenimiento y desmontaje del mobiliario temporal de playas que se organizará según la temporada y las necesidades.
Por otro lado, está la retirada de biomasa. Estos trabajos consisten en la retirada mediante maquinaria ligera de los detritos y biomasa acumulados en las playas del Mar Menor siguiendo el Manual de Buenas Prácticas redactado por la Subdirección General de Patrimonio Natural y Cambio Climático para tales fines.
El segundo lote comprende el suministro de materiales y mobiliario necesarios para la buena ejecución del servicio y tiene un coste anual de 100.000 euros.
El procedimiento de contratación es abierto y las ofertas se podrán presentar hasta el próximo cinco de enero.