El profesor de la UMU Miguel López-Morell, en 2018, en una imagen de su etapa como diputado en la Asamblea Regional. Foto: CS MURCIA (EFE). Había vuelto a sentirse activo dentro de la Ciudadanos de la mano de Ana Martínez Vidal, pero, ahora sí, lo deja definitivamente. Miguel Ángel López-Morell, que fue diputado de Ciudadanos durante la anterior legislatura (2015-209), se une a lista de militantes naranjas que sale del partido a raíz de la moción de censura presentada junto con el PSOE contra Fernando López Miras.
En febrero de 2020, López-Morell ya dijo que se apartaba del partido, aunque no se dio de baja como afiliado. Pero meses después, en noviembre, fue llamado a filas por la nueva líder, Martínez Vidal, y se reenganchó al proyecto como coordinador del grupo de trabajo de Universidades.
Ahora se marcha harto de los bandazos de su formación. En declaraciones a Efe, López-Morell apuntaba este miércoles que ha sido "siempre bastante crítico", de lo que ha dejado "evidencia" en sus artículos en el diario La Verdad, "y en Ciudadanos ha faltado mucha crítica interna". Y añadía: "En el pasado se han hecho las cosas regular, pero en las últimas semanas ha sido ya el colmo de una larga serie de torpezas que han hecho que el partido haya dejado de ser útil, y un partido tiene que serlo", ha señalado, agregando que "se ha puesto en peligro este proyecto de centro liberal".
En su opinión, "el problema viene de la forma de tomar las decisiones en el partido y la última en Murcia ha sido un fracaso", con lo que van "a estar peor después de las próximas elecciones". A su juicio, "Ciudadanos tiene que reformarse y tiene muchos visos de desaparecer y espero que haya un partido al que yo pueda votar", sostiene el profesor de Historia Económica de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Murcia, para quien "la puntilla" fue "la falta de reacción" del partido en la reunión de la Ejecutiva nacional de este lunes, donde "no se asumieron los errores".
López-Morell era un histórico de Ciudadanos. Se afilió en los orígenes del partido y conformó, junto con Miguel Sánchez, Juan José Molina (que sigue todavía en primera línea) y Luis Fernández, el primer grupo parlamentario naranja en la Asamblea. En 2019, tras terminar su periplo como parlamentario regional, López-Morell concurrió a las primarias para ser cabeza de lista para el Congreso de los Diputados, pero perdió la votación ante Miguel Garaulet.
Después no fue incluido en ninguna de las candidaturas de las elecciones generales y quedó relegado a militante raso. Durante el proceso de renovación interna que se abrió tras la dimisión de Albert Rivera, Morell se erigió como una de las voces más críticas de Ciudadanos ya que reclamaba un viraje en el rumbo del partido, como así defendía en redes sociales y en artículos en prensa.
Se presentó a la lista de de compromisarios de la lista crítica del castellanoleonés Francisco Igea -que disputó sin éxito el liderazgo a Inés Arrimadas-. Pero, a finales de febrero, comunicaba en Twitter "que se bajaba en la siguiente parada" tras los fallos informáticos de las primarias. "Hasta aquí he llegado", tuiteaba, apostillando: "En este momento me tengo que bajar; no quiero perder más amigos ni salud".
