Juan Casinello, director de SuperlumenMURCIA (EUROPA PRESS). La creatividad tecnológica murciana se sitúa a la vanguardia mundial de los videojuegos como lo demuestra el lanzamiento al mercado global del videojuego de terror Desolatium generado desde el Parque Científico de Murcia por la empresa Superlumen, para esta Navidad, y que se desarrolla en escenarios reales de la Región.
El videojuego, hecho sobre la base de realidad virtual, sirve para todas las plataformas y consolas como PS5, PS4, XBOX, Nintendo suit y PC. Como explica Juan Casinello, director de Superlumen, "es un desarrollo de ocio muy murciano que se vende a nivel mundial, en el que salen parajes de nuestra tierra, lugares icónicos como el sanatorio abandonado de Sierra Espuña, y otras zonas de la Comunidad Autónoma, hasta bares o discotecas de referencia".
Estos emprendedores tecnológicos trabajan de la mano de la multinacional holandesa Soedesco, y acaban de colocar en el mercado este producto lúdico que se puede obtener en todos los países del mundo traducido a 15 idiomas. En tiendas físicas los comercializa Fnac, y, en digital, en cualquier espacio de venta de las plataformas internacionales citadas.
"La venta es global desde Canadá a Japón, o China. Se reciben feedback de jugadores de todos los continentes", asegura el director de Superlumen.
Superlumen es una empresa tecnológica de producción de videojuegos que surgió aquí, pero a la americana. Un grupo de amigos apasionados por los contenidos digitales se juntaron para crear sus propios productos y, así, convertir el ocio en negocio.
La compañía se fundó hace ocho años, para transformar el hobby en algo productivo. Ahora, el principal accionista es la multinacional holandesa que hace la distribución en todos los continentes. Gracias a ellos se exporta en digital y en contenido material a todos los mercados operativos.
Para 2024 tienen previsto lanzar otros dos videojuegos que ya están en marcha. "Este año hemos abierto una oficina en Madrid con ocho personas", confirma Casinello. "Del estudio murciano hecho con amigos, vamos a ampliar progresivamente".
Aterrizaron en el Parque Científico en 2018 a raíz de ganar el premio al juego más innovador del año de Play Station de la V Edición. "Nuestra producción se acomodaba muy bien a los requisitos del Parque y enseguida comenzamos la instalación. El entorno nos encantaba y es muy adecuado", resalta Juan Casinello. "Aquí estamos rodeados de empresas tecnológicas que generan sinergias y networking. Todo está a favor de potenciar la creatividad".
Y es que, el sector del videojuego como negocio genera un crecimiento espectacular porque hay mucho recorrido en todas las áreas, según confirman los desarrolladores de la empresa murciana.
En la actualidad, globalmente, los videojuegos facturan más que el cine y la música juntos. Según los datos de la Digital Entertainment and Retail Association (ERA), representaron el 42,1 por ciento de los ingresos totales del entretenimiento en 2022, creciendo en 2,3 por ciento respecto a 2021. Estas cifras han situado la facturación en un total de 5.421 millones de euros.
Pero, según los creadores murcianos, es cierto que conceptualmente en España aún se está verde porque se encuadra para un potencial mercado solo de niños, y esto no es así.
El impulso de la compañía se ha generado desde la perspectiva de que el entretenimiento es algo esencial a lo que todas las personas de hoy dedican muchos recursos económicos. Pero, como negocio, aún se ve, por los más conservadores, como algo de poco retorno en las inversiones.
Seguir el ritmo de los mercados internacionales del videojuego es muy caro, afirma Casinello: "nuestras ferias para la difusión se encuentran San Francisco, Japón,etc. y el apoyo que se recibe, frente a otros sectores, es menor ante la incertidumbre. Nosotros nos costeamos esos gastos para estar presentes en el mercado internacional".
El Instituto de Fomento de la Región de Murcia "nos ha aportado todo tipo de ayuda, desde formación empresarial a comercialización", asegura el director de Superlumen. "Nuestro perfil profesional es de ingenieros, y la parte empresarial ha ido de la mano del Instituto de Fomento. En el área comercial, también ha sido imprescindible. Al estar en el Parque Científico nos han ayudado mucho. Se preocupan por nosotros".
