MURCIA. Ciudadanos busca calmar las aguas tras la tormenta desatada en el Ayuntamiento de Murcia. La formación liberal aboga por rebajar la tensión y garantiza que el mandato del Gobierno local se va a cumplir a pesar de todo. Esa es la posición del partido a la espera de que se pronuncie el PP, cuya dirección nacional estudiará el caso de la capital de la Región.
El Ejecutivo de Murcia, una coalición de PP y Cs, sufre su mayor crisis interna después de que el concejal de Fomento, Mario Gómez, firmara un pacto de reactivación económica con PSOE y Podemos a espaldas de su socio de Gobierno. La teniente de alcalde, Rebeca Pérez (PP), acusó a su compañero de "traición y deslealtad" por suscribir "un plan de Gobierno con la izquierda", que calificó como una "artimaña política".
Desde la dirección nacional de Ciudadanos, la consigna pública pasa por defender que no existe una crisis de Gobierno. Desde la dirección regional, en manos de una gestora, el mensaje ha pasado por conceder normalidad a las distensiones al mismo tiempo que se descarta que se esté preparando una moción de censura, como así aseguró su portavoz, Jerónimo Moya, a La 7 TV.
En Murcia no hay ningún problema, sostiene públicamente Edmundo Bal, el portavoz de Ciudadanos en el Congreso en ausencia de Inés Arrimadas -de baja por maternidad-. El dirigente restó importancia a los roces del Consistorio murciano y manifestó que "es un Gobierno unido". "Tenemos la perspectiva de terminar la legislatura", añadió, en palabras recogidas por Europa Press tras la reunión de la ejecutiva nacional.
"Independientemente de las diferencias que puedan existir en el día a día, como es lógico en todos los Gobiernos que son de coalición, estamos dando una respuesta común a todos los murcianos desde el Ayuntamiento, que es una fórmula de éxito y un ejemplo de buena gestión", manifestó Bal, que también defendió "la solidez" del Gobierno de Madrid, igualmente en coalición con el PP.
En la Región, Jerónimo Moya, portavoz de la gestora, mantiene que su formación antepone "el interés de los murcianos a los intereses partidistas y personales". Sin embargo, puntualizó que "nada va a anteponer" a los pactos de gobernabilidad con el PP en la capital del Segura. "Pueden surgir distensiones a lo largo y ancho de la legislatura", justificó mientras catalogaba la crisis como "un tira y afloja" fruto de un "ejercicio de madurez democrática" que a su juicio se puede "resolver con diálogo y consenso".
Con todo, la mesa de seguimiento de los pactos de gobernabilidad abordará este jueves el conflicto de Murcia. "Valoraremos y reajustaremos lo que tengamos que reajustar, pero es un asunto puntual", afirmó a la tele autonómica. "Por encima de todo hay un acuerdo de Gobierno con el PP", subrayó Moya, que sí fue tajante a la hora de rechazar una posible moción de censura en el Ayuntamiento. "No la va a haber. No no la planteamos. Tenemos un acuerdo en la Comunidad, que está funcionando bien. Y en el ámbito local estamos muy contentos con la labor que estamos desempeñando", zanjó.