Cruce de reproches entre López Miras y la Delegación por el cerco a la Asamblea

MURCIA (EP). Cruce de reproches entre el Ejecutivo regional y la Delegación del Gobierno a cuenta del cerco a la Asamblea Regional protagonizado este miércoles por dos centenares de agricultores, que bloquearon las puertas del Parlamento autonómico. Un grupo de los manifestantes (que protestaron sin permisos ni autorizaciones) llegó incluso a zarandear el coche oficial del presidente de la Comunidad, Fernando López Miras. El propio mandatario regional acusa a la Delegación del Gobierno de "inacción" e "incapacidad", el PP exige la dimisión de la delegada Mariola Guevara y la Delegación se defiende, justificando la actuación policial.

Cabe recordar que el suceso ocurrió en la tarde de este miércoles. Tras acabar el pleno de la Asamblea (cuya sesión vespertina fue una sesión de control al presidente del Gobierno, quien abordó precisamente la crisis del sector agrario y sus manifestaciones), alrededor de doscientas personas (trabajadores del Campo de Cartagena) llegaban a la ciudad portuaria en sus tractores y camiones y se situaron en las salidas de la Asamblea, sita en el paseo Alfonso XIII, una de las vías de entrada y salida del municipio. 

Los manifestantes, así, impidieron la salida de los diputados. Varios de ellos se acercaron al coche de López Miras e incluso lo zarandearon, según informan fuentes de la Agencia Efe. El vehículo tuvo que regresar al garaje. El incidente no fue a mayores, pero los agricultores se apostaron durante dos horas. El bloqueo terminó justo cuando pactaron con López Miras una reunión con la consejera de Agricultura, Sara Rubira, para el próximo lunes.

"Exaltados con actitud agresiva y violenta"

El jefe del Gobierno autonómico, en declaraciones al programa Al rojo vivo (La Sexta) recogidas por Europa Press, calificó como "muy graves" los incidentes y relató cómo vivió in situ la situación: "Un grupo de manifestantes exaltados, con actitud muy violenta, muy agresiva, intentaron rodear el vehículo con golpes, puñetazos en los cristales; intentaron abrirlo y cercaron el Parlamento autonómico", expuso el murciano, explicando que ante estos hechos tuvo que regresar a la Asamblea. Una vez dentro, tanto él como parte de los diputados regionales, los funcionarios y otros trabajadores, se mantuvieron "retenidos". "Muchas personas con ataques de ansiedad, llorando, en fin, muy nerviosos, en una situación muy delicada", describió.

El mandatario señala que los hechos fueron "muy graves" tanto por la actitud "agresiva y violenta" de un grupo de manifestantes, como por "la incapacidad y la dejación de funciones" que mostró la Delegación del Gobierno, a la que ha criticado por no planear "un dispositivo de seguridad suficiente". Según su versión, "la única solución que dieron desde la Delegación del Gobierno, vía WhatsApp, es que, o recibía a aquellos que estaban cercando el parlamento autonómico, o teníamos que dormir allí".

El presidente, que pide explicaciones a la Delegación, indicó que se dispuso a salir de la Asamblea porque nadie había solicitado reunirse con él, algo a lo que no dio importancia porque él lo hace "semanalmente con los representantes de todos los agricultores, con las organizaciones agrarias", a los que reconoce como interlocutores válidos. "Yo la semana pasada me reuní con las organizaciones agrarias; conozco perfectamente sus reivindicaciones, el 90% son cuestiones de competencia estatal e incluso europea, de hecho durante toda esta semana hemos cerrado un plan de financiación plurianual para aportar fondos propios de la comunidad allí donde no llega, por ejemplo, la PAC", dijo.

"Estupefacción por las afirmaciones"

Tras conocer estas palabras, la Delegación del Gobierno envió un comunicado negando "categóricamente" que la única respuesta que ofreció al Ejecutivo regional vía Whatsapp durante el bloqueo fue que, "o el presidente recibía a aquellos que estaban cercando el parlamento autonómico, o tenían que dormir allí".

La institución que encabeza Mariola Guevara expresa su "estupefacción por tales afirmaciones" y defiende la actuación de la Policía Nacional con un dispositivo que, en los momentos de mayor tensión, "estaba formado por más de 50 agentes y que en todo momento garantizó la integridad del Parlamento Regional, sus diputados y trabajadores".

De hecho, la Policía Nacional ha identificado a cerca de sesenta propietarios de tractores que participaron en las protestas y que se enfrentan a posibles sanciones por infracciones de las leyes de seguridad ciudadana y seguridad vial. Además, se ha identificado a los responsables de determinados altercados que podrían acarrear sanciones administrativas o penales.

En cambio, desde el PP exigen la dimisión de Guevara, pues consideran que es la máxima responsable. El portavoz parlamentario de los populares, Joaquín Segado, pide la renuncia de la delegada por su "nefasta gestión" y por "permitir" que "se cercara" al Parlamento autonómico, la sede de la soberanía popular de los murcianos. A su juicio, "los hechos que se produjeron este miércoles, el cerco a la Asamblea Regional, son muy graves". Y acusa a Guevara de conocer la convocatoria de la manifestación. Y si no lo conocía, apostilla, "es una grave irresponsabilidad".