Fotos: MUNDO TORO Y HOSPITAL MESA DEL CASTILLO
MURCIA. Carlos Alcaraz Garfia ya está en Murcia, donde descansará y desconectará del tenis durante unos días tras finalizar la gira americana y antes de ir a la conquista de China, país en el que debutará jugando por primera vez el ATP 500 de Pekín y el Masters 1.000 de Shanghai.
El joven jugador de El Palmar, eliminado por el ruso Daniil Medvedev en las semifinales del Abierto de Estados Unidos y que ahora ocupa el segundo puesto en la ATP al haber cedido el liderato de la clasificación mundial ante el serbio Novak Djokovic, necesita parar para luego volver con fuerza en un tramo final de la temporada en la que aún tiene por delante grandes retos con la Copa de Maestros asomando en el horizonte.
Alcaraz, a su llegada a casa, se sometió a una serie de pruebas médicas en el hospital Mesa del Castillo, al que acudió acompañado por su médico personal, Juanjo López, y por su fisioterapeuta, Juanjo Moreno.
Fue un test de control tras el gran desgaste físico y mental que conllevó su participación en el US Open y antes en los Masters 1.000 de Cincinnati y Toronto.
Además, estuvo presente en la Plaza de Toros de Murcia viendo una corrida de la Feria de Septiembre junto al torero Pepín Liria y el entrenador de fútbol José Antonio Camacho.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero, quien renunció a disputar la Copa Davis con España en Valencia, reaparecerá en Pekín en un torneo cuyo inicio está fijado para el día 28; posteriormente participará en Shanghai del 4 al 15 de octubre, y, ya de vuelta a Europa, competirá en el ATP 500 de Basilea, en el Masters 1.000 de París-Bercy y en las Nitto ATP Finals de Turín.
Lo inmediato, por lo tanto, le llevará a China. Será su estreno en el gigante asiático, país en el que viven más de 1.400 millones de personas, y es una ocasión comercial además de tenística para un fenómeno global como es ya el deportista español.