Alcaraz cae ante Carreño en la final del Torneo 25 Aniversario de la JC Ferrero Equelite en Villena

MURCIA. El joven tenista murciano Carlos Alcaraz Garfia, quien había ganado los siete partidos que había disputado desde su regreso a las pistas tras el largo parón por la pandemia del coronavirus, ha perdido este domingo en el octavo ante el asturiano Pablo Carreño Busta, que ha sido superior en la final del Torneo 25 Aniversario de la JC Ferrero Equelite Sport Academy, la cual se ha llevado en dos sets por 6-1 y 6-4 en apenas una hora y cuarto.

Carreño, gijonés de 29 años y jugador número 25 del mundo, comenzó el encuentro en modo apisonadora y en el primer set pasó por encima de su compañero de entrenamientos en la academia que gestiona en la localidad alicantina de Villena Juan Carlos Ferrero, por cierto entrenador de Alcaraz.

Así, el que llegó a ser top 10 de la ATP fue sumando punto a punto con su saque y al resto hasta situarse con un claro 5-0.

Pese a que Alcaraz por fin ganó su saque en su tercer intento, su rival no quiso sorpresas y en su siguiente servicio cerró el set por la vía rápida.

Alcaraz, de tan sólo 17 años y que ocupa el puesto 318 de la clasificación de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), no estaba dispuesto a rendirse pues eso no va con él y la consecuencia de ello fue que el segundo parcial fue otra historia.

Aunque Carreño mantuvo el nivel, el de El Palmar reaccionó para llegar a ir ganando por 3-4, pero el asturiano, en el momento clave de la final, encadenó tres juegos seguidos para llevarse el título sin ceder ni una sola vez su saque y ganando la mayoría de ellos con autoridad.

Cabe recordar que en su camino hacia la final Carreño se impuso al malagueño Alejandro Davidovich por 6-4, 3-6 y 6-3 y al alicantino Mario Vilella por un doble 6-4, mientras que Alcaraz hizo lo propio frente al portugués Joao Sousa por 0-6, 7-6 (3) y 6-3 y frente al australiano Álex de Miñaur por 6-3, 2-6 y 6-4.

En el partido por el tercer puesto, De Miñaur se retiró con molestias en un muslo cuando perdía por 2-5 ante Davidovich.

Este torneo, que se celebró con público aunque con restricciones de aforo, tenía carácter benéfico y los cuatro jugadores que participaron en los partidos de esta jornada cedieron sus premios a organizaciones benéficas como Apadis, Unicef, Cáritas y Save the Children.