MURCIA. Vox y Podemos son partidos antagónicos, con muy poco - o nada- en común, pero por un día votaron lo mismo en la Asamblea Regional: dijeron 'no' a las enmiendas suscritas de forma conjunta casi al 90% entre el Gobierno regional y el PSOE, principal partido de la oposición, para sacar adelante la Ley de Recuperación y Protección del Mar Menor. Vox y Podemos coincidieron en su rechazo a la norma, aunque, eso sí, emplearon argumentos diferentes. Para Vox, el acuerdo de PP, Ciudadanos y PSOE es "el pacto de la vergüenza"; para Podemos es "el pacto del nitrato".
"La ley no responde a sólidos fundamentos técnicos ni científicos, sino que proviene de acuerdos y componendas políticos", cargaba el portavoz parlamentario de Vox, Juan José Liarte. En esta ocasión Vox, cuyo grupo parlamentario se encuentra resquebrajado, votó unido. Tanto los tres parlamentarios expulsados por su partido como el único representante que reconoce la formación de Santiago Abascal se opusieron al texto. "Nuestros agricultores sufrirán esta ley, criminalizados como los principales causantes del estado del Mar Menor", lamentaba Pascual Salvador, el diputado 'leal' de Vox.
Liarte aduce que la única solución pasa por que los políticos "dejen de hacer política" con la laguna y aboga por crear un órgano eminentemente técnico. Considera además que las medidas aprobadas "perjudican a muchas personas" y apostilló que ni siquiera "los partidos que firmaron el acuerdo saben si la ley es buena, simplemente confían en que sea así". Para Salvador, la solución pasa por la construcción de las infraestructuras necesarias y la aplicación del plan vertido cero. A su juicio, "se engaña a la ciudadanía diciendo que con esta ley se soluciona el problema del Mar Menor".
La portavoz del Grupo Mixo -del que forma parte Podemos-, María Marín, también cargó contra la ley. "Está llena de trampas y nace ya muerta" porque, esgrimió, "seguirá blanqueando las prácticas agroindustriales e incluso subvencionará la aplicación de nitratos en la zona 1 con la denominación de agricultura sostenible de precisión". En su opinión, el artículo 29, que regula los usos permitidos en la franja de 1.500 metros, abre la puerta a la contaminación. "PP, PSOE y Ciudadanos legalizan un disparate como es autorizar que cada hectárea cultivada pueda arrojar 170 kg anuales de nitratos", apuntó la parlamentaria. Marín asegura que es "una oportunidad perdida" y criticó que la norma "provocará una gran inseguridad jurídica" porque se queda "muy corta". Y añadió, reprobadora: "Es una norma redactada "al dictado de quienes son los responsables materiales del atentado contra nuestra tierra".
La diputada morada también tuvo palabras de reproches para el PSOE, que ha consensuado casi todas las enmiendas con los dos partidos del Ejecutivo, PP y Ciudadanos. Diego Conesa, recriminó, "ha pasado en cuestión de dos meses de anunciar una moción de censura por el estado del Mar Menor a pactar con el Gobierno regional una ley que ni protege, ni recupera ni garantiza el futuro de la laguna". Y agregó que no entiende "cuáles son los intereses que hay detrás de ese cambio de rumbo".
Podemos no consiguió que prosperara su enmienda para crear un parque regional en el Mar Menor, pero sí vio aprobada una propuesta para incluir en la ley un capítulo económico que recoge "ayudas directas a los agricultores que hacen las cosas bien y quieren seguir haciéndolas": a todos esos pequeños y medianos agricultores, expuso Marín, "que compraron una tierra en el campo de Cartagena y que necesitan ayuda para adaptarse a esta nueva situación".