MURCIA. La plantilla del UCAM Murcia Club Baloncesto ya está oficialmente de vacaciones después de que este lunes se decidiera aprobar el nuevo modelo para poder acabar la Liga Endesa ya sin el conjunto grana en liza y también libre del descenso. Ahora toca planificar, en la medida de lo posible, un futuro con muchas incertidumbres y tan sólo con el entrenador Sito Alonso y el base brasileño Rafa Luz con contrato garantizado para la temporada 2020/2021.
El campeonato ha finalizado para el conjunto universitario tras acordarse que si la Liga se reanuda tras haber remitido la pandemia del coronavirus Covid19 lo hará con una fase en la pelea por el título con los 12 primeros clasificados. El UCAM CB, al ser decimosexto, no entraría en esa pugna pero al menos ha alcanzado sin sufrir el objetivo de la permanencia en la máxima categoría del baloncesto español.
La próxima será la décima campaña consecutiva de los granas en la élite, a la que se incorporó por última vez en 2011 y en la que ha estado 22 temporadas en cinco ciclos, siendo éste el más prolongado.
Para que comience ese curso todavía tendría que acabar el actual, aunque para la entidad uiversitaria eso ya ha ocurrido. Por eso, la plantilla ya está de vacaciones y sus integrantes se pueden marchar, algo que no había hecho nadie pues todos seguían en Murcia a la espera de la resolución de la temporada.
Quienes deseen seguir en Murcia pueden hacerlo hasta el 30 de junio con el piso y el coche pagados por el club y disfrutando de los servicios que éste le ofrece, como por ejemplo la atención en los entrenamientos individualizados que se han llevado a cabo en este tiempo de confinamiento.
Así se lo hizo saber el director general, Alejandro Gómez, a los jugadores y técnicos a través de una videollamada en la que se les dio las gracias por "su comportamiento ejemplar y su compromiso", cuestiones que quedaron de manifiesto entrenando a diario y accediendo a rebajarse el salario un 18%.
Precisamente Alejandro Gómez volverá a tener ante sí el reto de planificar el futuro de un club consolidado en la Liga Endesa y que para el siguiente ejercicio tan sólo tiene con contrato garantizado a Sito Alonso y a Rafa Luz.
Luego hay algunos jugadores con opciones en sus contratos para continuar y habría que sentarse con ellos a negociar, algo que ahora se podrá hacer con más perspectiva en cuanto a tiempo -la campaña ha acabado en abril para el UCAM CB-, pero con menos seguridad en cuanto a lo que poder ofrecer, pues el próximo presupuesto estará condicionado por ingresos que están en el aire como los correspondientes a abonos y taquillas -no se sabe cuándo volverá la actividad ni si será a puerta cerrada o con las gradas abiertas al público- y también los que tienen que ver con los patrocinadores.
Entre los jugadores a los que convendría renovar están los estadounidenses Askia Booker y Jarell Eddie, sin duda los dos mejores del equipo en este campeonato, y el dominicano Sadiel Rojas, capitán del equipo, mientras que más dudas hay en torno a los demás integrantes del grupo -el también dominicano Marques Townes, el jamaicano Kyle Hunt, el guayanés Delroy James, el rumano Emanuel Cate, el griego Giannoulis Larantzakis, el letón Rinalds Malmanis y el serbio Nikola Radicevic, éste cedido por el Herbalife Gran Canaria, más el español Edu Durán-.
El belga Kevin Tumba sigue todavía cobrando del club a pesar de que se le ha buscado salida y no lo hacen algunos de sus compañeros en este curso y que abandonaron la plantilla antes de que se paralizara la competición como el alero montenegrino Dino Radoncic y el ala pívot serbo griego Dusan Sakota.
Manu Lecomte, base también belga, está cedido en el Herbalife Gran Canaria, con el que por cierto sí podría disputar la fase por el título.