MURCIA. El Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar ha decidido que un ejemplar de palmera de diez brazos, ubicado frente al paseo de la playa de La Puntica, permanecerá en su lugar habitual tras el derribo de la casa en la que se ubicaba (Villa Estrella). Desde el Consistorio han informado de que los servicios municipales estudiaron la posibilidad de trasplantarla a otra zona -como el propio paseo marítimo o el entorno del nuevo teatro Geli Albaladejo-, pero "tras comprobar la dificultad del trasplante y que el lugar actual permite la accesibilidad, se ha decidido mantenerla y acondicionar el alcorque, integrándola en la acera".
Asimismo, añaden que en la misma parcela se ubica además un pino de grandes dimensiones, ejemplar protegido, que se mantendrá también, integrándose igualmente en el paso peatonal.
La decisión ha sido aplaudida en redes por numerosos vecinos de Lo Pagán -a la par que reclaman más atención para zona-, señalando, por ejemplo, que "es agradecer que se respeten y le den importancia a estos árboles". También reclaman, entre otras cosas, que se proteja "el árbol más singular del municipio, el taray que está cerca de los Sáez en un terreno rustico privado en la Generala, ha sufrido varias agresiones y está cada vez más deteriorado y al final se va a secar".
Cabe recordar que la Agrupación Independiente San Pedro del Pinatar había solicitado información sobre el destino del este árbol tras ser derribada la casa del siglo XIX en cuyo solar se ubicaba. Se trata -señalaban- de un Phoenix Dactylifera de 10 brazos, poco habitual en su especie. También se interesaban por el pino centenario, "dado el desconcierto social que ha suscitado el derribo de la vivienda".