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MURCIA. Pablo Alfaro, nuevo entrenador del Real Murcia, club en el que ocupa el puesto del destituido Gustavo Munúa y en el que tratará de lograr el ascenso a LaLiga Hypermotion, afirmó que "habrá cambios pero no será una revolución" y manifestó que le pedirá a sus futbolistas "humildad, respeto a los rivales y ambición".
El técnico zaragozano, de 54 años y que firmó contrato hasta el final de la presente campaña, se hace con las riendas del octavo clasificado del grupo 2 de la Primera RFEF con 17 puntos sumados en 11 jornadas y estando a uno de la zona de promoción de ascenso y a 11 del líder, un Club Deportivo Castellón que a día de hoy subiría como campeón.
Debutará en el banquillo grana el domingo a las ocho de la tarde en el encuentro que tendrá lugar en el estadio Enrique Roca frente al Real Madrid Castilla y, a tres días de ese estreno y apenas unos minutos después de anunciarse su fichaje, compareció ante la prensa.
En la presentación estuvo acompañado por el máximo accionista del club y consejero delegado, Felipe Moreno; la presidenta, María del Mar Carrillo, el vicepresidente, Juan José Fernández, y el director deportivo de la entidad, Javier Recio.
Recio fue el que le dio la bienvenida y, tras lamentar el hecho de haber tenido que cambiar de entrenador tan pronto, valoró al técnico entrante.
"Pablo es un entrenador que conoce perfectamente la categoría y nos va a aportar experiencia y carácter", dijo.
A continuación el maño reconoció que para él es "un gran reto y un orgullo" llegar al club de la capital del Segura. "Me hace mucha ilusión defender esta camiseta y este escudo", añadió.
Alfaro habló de cómo están siendo las primeras conversaciones con el director deportivo: "El traspaso de información está siendo muy fluido y muy rápido".
El aragonés sabe a qué equipo llega y lo que se le va a pedir. "Aquí la exigencia es máxima y sabemos que tenemos que ganar desde ya empezando por el domingo", aseguró.
Ya en lo concerniente al trabajo que le espera declaró que se enfocará en "sacar lo máximo de cada jugador para que luego se vea reflejado en el equipo".
"Necesito tiempo para que el equipo sepa lo que quiero pero ya el domingo intentaremos hacer lo que queremos. Las tres ideas que le voy a transmitir al vestuario son humildad, respeto a los rivales y ambición", añadió el de Zaragoza y que tiene experiencia como entrenador en Pontevedra, Huelva, Leganés, Huesca, Marbella, Miranda de Ebro, Ibiza, Córdoba y San Fernando.
Sobre si se cambiará mucho con respecto a la etapa de Munúa indicó lo siguiente: "Habrá cambios pero no será una revolución. Aquí hay mucho bueno y daremos matices diferentes".
En la plantilla murcianista hay un buen número de lesionados y a ello también se refirió Alfaro apelando a su formación universitaria como doctor. "Estudié medicina y le doy mucha importancia al trabajo preventivo, a la recuperación y a la nutrición", expuso.
