MURCIA. Ya es oficial. José Vélez deja la política al renunciar como diputado en la Asamblea Regional. El que fuera líder de los socialistas murcianos hasta marzo de este año ha presentado formalmente su renuncia en la Mesa del Parlamento autonómico. Su escaño será ocupado por Pedro López Hernández, el número 15 en la lista del PSRM, aunque queda vacante el puesto de portavoz en la Cámara. Ahora su grupo parlamentario tiene que elegir a un nuevo jefe de filas, que en el práctica supone ejercer como 'líder de la oposición' ya que el PSOE, con sus 13 escaños, es el segundo grupo más numeroso tras el PP (el partido del Gobierno).
"Hoy es un día muy especial y de emoción", reconocía en su despedida, acompañado por sus compañeros de bancada del PSOE, su "gran familia", como él mismo describía. "Me siento muy orgulloso de mis compañeros por su gran trabajo en la Asamblea Regional", decía. Devoto y religioso, también se acordó de su patrona, la Virgen de la Esperanza: "Le voy a pedir que no me muera sin ver a mi partido gobernar esta Región". Tuvo palabras para el nuevo secretario general, Francisco Lucas, de quien pegará carteles electorales "como el que más". Si se convierte en presidente, afirmó, sería "el día más feliz" de su vida. Asevera que se marcha sin tristeza pero con satisfacción "por haber trabajado por la gente" y se lleva "muchas amistades". Matiza que de "la política nunca se sale", porque "siempre" ayudará "al ciudadano" pero ahora está "a disposición" de "todos", aseguró, acordándose también de los medios de comunicación "por su respeto": "Habéis perdido un político, pero ganáis un amigo".

- Despedida de José Vélez. -
- Foto: PSRM-PSOE
Vélez había anunciado por sorpresa su marcha en diciembre, tan sólo dos semanas después de haber proclamado que quería opar a la reelección como líder del partido que dirige desde 2021. Pero cambió de planes y dio un paso al lado. Desde ese momento pasó a un segundo plano en el partido, que celebró sus primarias y eligió a un nuevo secretario general tras el duelo entre Francisco Lucas y Diego Conesa, dos personas a las que Vélez conoció muy bien, pues fue 'maestro' del primero y escudero del segundo. Mientras tanto siguió ejerciendo como portavoz parlamentario, aunque era cuestión de tiempo que abanadonara el puesto.
De concejal a ser alcalde, delegado del Gobierno y líder del PSOE
Ahora regresa a su plaza de funcionario en el Servicio Murciano de Salud como técnico administrativo en el hospital de Los Arcos de San Javier. Dice adiós a una vida política que comenzó en 1999 como concejal en su municipio, Calasparra, y que le llevó a ejercer como alcalde entre 2014 y 2020 y también a desempeñar como delegado del Gobierno en la Región entre 2020 y 2023. Sanchista convencido, fue uno de los dirigentes que apoyó a Pedro Sánchez durante su travesía en el desierto. En 2021 se convirtió en el líder del PSRM tras la salida de Conesa al imponerse en unas primarias a la entonces senadora Lourdes Retuerto. El calasparreño arrasó en la votación (obtubo el 81,7%) y mantuvo su liderazgo sin apenas contetación interna en estos últimos cuatro años. Sin embargo, en mayo 2023 sufrió un gran tropiezo en las urnas: el PSOE perdió la condición de primera fuerza y se dejó cuatro escaños. Aquel fiasco pasó de puntillas gracias a la rápida maniobra de Sánchez, que convocó elecciones generales un día después del golpe de las autonómicas, apartó muchos procesos internos de autocrítica.
Aquel no fue el único vaparapalo. Otro lastre que le ha perseguido en los últimos años era su consabida situación judicial. Imputado (la figura jurídica hoy conocida como investigado) en el llamado 'Caso Feria Taurina del Arroz', solamente la Audiencia Provincial puede evitar que se siente en el banquillo de los acusados si prospera su recurso, pues el juez instructor ordenó la apertura de juicio oral contra el exregidor y dos exconcejales. La Fiscalía pide 8 años y seis meses de cárcel por presunta prevaricación continuada, malversación de caudales públicos y falsedad documental. Él, que se jacta de haber salido indenme de muchas denuncias, siempre defendió su inocencia, convencido de que es otra maniobra de la oposición para apartarle políticamente.