MURCIA. En esta casa de Molina de Segura los arquitectos han hecho magia de la buena, logrando crear en una parcela pequeña una vivienda grande, con una piscina inifinita, espacios interiores y exteriores donde disfrutar, y donde no falta ni siquiera un gimnasio. "La Casa Poniente ha sido un importante ejercicio de optimización de la distribución y funcionalidad de los espacios a conseguir", señalan desde el estudio murciano UNO100 Arquitectura, que ha sido el que se ha encargado de concebir esta edificación adaptándose a dos niveles, donde se pueden encontrar volúmenes escultóricos, donde la piedra está muy presente y donde el equilibrio reina.

Los arquitectos explican que "el espacio exterior se divide en dos niveles para un uso independiente: el superior a la cota de la casa, y el inferior, a la cota del garaje, partidos por jardineras de piedra que salvan el desnivel y sobre las que vierte la piscina infinita. La vivienda toma forma de L alrededor de la piscina, materializándose en blanco y en la misma piedra que las jardineras".

Se trata de una casa, articulada por la terraza, donde los espacios marcan límites. Así, la piscina se presenta como una lámina de agua que delimita de una forma difusa la terraza y el patio inglés. Este último, desde una determinada perspectiva, se presenta como "un límite con la terraza superior rotundo, escalonado en piedra, dejando el agua desbordar y caer".

El salón cuenta con grandes vidrieras, de tal forma que se integra completamente en la terraza, difuminándose el límite entre el interior y el exterior. Asimismo, la pérgola de la terraza superior se prolonga desde el salón hasta el horizonte más allá de la piscina infinita.

La fachada de los dormitorios se caracterizan por "una seriación del lleno y el vacío de la piedra y el vidrio". El volumen de la zona de noche también se abre a la piscina a través de un pasillo exterior de acceso a los dormitorios. 

Los espacios tienen un interiorismo minimalista en blanco y negro, con pavimento y detalles en madera. Destaca el volumen del mueble de cocina, que separa la entrada del salón-comedor, dando privacidad y manteniendo la continuidad del espacio. Ademas, el garaje -o espacio para cualquier uso independiente de la casa-, está cubierto pero es exterior, entrando la luz entre la casa y el muro.

Los arquitectos de UNO100 están convencidos de la importancia de apostar por la calidad y la eficiencia en la forma de trabajar y de construir, apostando en sus proyectos por el confort y la sostenibilidad.