MURCIA. A escasas dos semanas de que comiencen las clases en la Región de Murcia, se ha desatado la polémica por las medidas anunciadas por la Consejería Educación para la ‘vuelta al cole’, que desde numerosas sectores se han calificado de insuficientes e inadecuadas y de gran riesgo para profesores y alumnos. En España, son pocos los estudios que se han realizado para evaluar cómo afecta la apertura de colegios a la propagación del virus ya que a diferencia de otros países europeos, las aulas han permanecido cerradas desde que comenzó el confinamiento en marzo. Sin embargo, un estudio sueco revela que las clases presenciales no afectan al nivel de contagios y que los profesores se encuentran entre las profesiones con menor riesgo de contraer el virus.
También el Centro de Control y Prevención de las Enfermedades de Europa (ECDC) ha elaborado un documento sobre el papel de los niños y los entornos educativos en la transmisión de la covid-19. Y las conclusiones también con positivas: que los niños vuelvan a las aulas es seguro.
Comparación entre Suecia y Finlandia
Teniendo en cuenta las distintas experiencias de Suecia y Finlandia, donde en el primer caso no se han cerrado nunca los colegios a pesar de la pandemia y en el segundo caso lo hizo durante dos meses, la Agencia Pública de Salud de Suecia y Finlandia publicó en julio un estudio sobre la incidencia de contagios de covid-19 entre niños en edad escolar en los dos países. A pesar de que Suecia tenía un nivel de contagios general mayor, el nivel de propagación del virus en ambos países fue similar.
En ambos países el número de positivos de covid-19 en niños ha sido muy bajo, solo un 0,6% en el primer caso y 0,3% en el segundo, y el seguimiento de los contactos llevado a cabo en escuelas de primaria de Finlandia no encontraron evidencias significativas de que los niños infectaran a otras personas.
La incidencia entre profesores es baja
Además, en Suecia se encontró que, en comparación con otras ocupaciones, el riesgo de contraer covid de los profesores de infantil, primaria y secundaria no llegaba a un 1%, a pesar de mantener las aulas abiertas. De hecho, los profesores de preescolar y los de secundaria son los grupos con menor nivel de contagio, con un 0,7%.
Las profesiones con más incidencia, con actualización a 25 de julio, eran los conductores de taxi, con un 4,8%; los 'pizza chefs', con un 4,5%, y los conductores de autobús y tranvía, con un 4,3%. En la parte media se sitúan los trabajadores de la industria, con un 2,5%; los bomberos, con un 2,2%, o los camareros, con un 1,5%.
Así, el personal que trabaja en entornos preescolares y educativos "no ha tenido un mayor nivel de incidencia de covid-19 en comparación con otras ocupaciones", asegura el estudio. "Los estudios muestran que el cierre de escuelas durante la pandemia actual no ha tenido un impacto significativo en el control de la transmisión".
En los dos países, la mayoría de niños asisten a infantil desde los dos hasta los seis años, a primaria desde los siete a los quince, y desde esa edad siguen tres o cuatro años en secundaria. Entre ambos tienen alrededor de 3,5 millones de niños entre 0 y 19 años y el estudio no encontró ningún fallecimiento por covid. Además, los niños no son un grupo de riesgo en la trasmisión del virus, incluso parece que tienen un rol menos importante de lo que se creía.
Las consecuencias del cierre de colegios, negativas
La Agencia Pública subraya, además, que la escuela "también es un lugar seguro y estable para muchos niños" y que antes de cerrar una escuela "debe haber planes para lugares alternativos donde los niños deberían ir en su lugar".
También señalan que el cierre de colegios tendría un grave impacto en la sociedad, como por ejemplo, en los trabajadores de servicios esenciales, y pondría a grupos vulnerables, como los abuelos, en riesgo al tener que asumir el cuidado de los niños.
Este estudio se basa en un informe anterior a finales de mayo de la Agencia de Salud Pública de Suecia que concluyó que los efectos del cierre de escuelas son "principalmente negativos”.
"La incidencia de covid-19 entre niños y jóvenes es baja. En la mayoría de los casos en los que los niños han dado positivo han sido infectados por un adulto y los síntomas son leves. Además, los niños transmiten infecciones menos que los adultos, y no se ha demostrado que las actividades educativas en Suecia impulsen la propagación de la infección".
Otro estudio europeo también apoya la vuelta a las aulas
Entre las conclusiones del documento del Centro de Control y Prevención de las Enfermedades de Europa (ECDC) destacan que la mayoría de los niños no desarrollan síntomas cuando se infectan, la transmisión de niño a niño en los colegios en infrecuente y no es la causa principal de la infección entre ellos.
Además, tal y como también muestra el estudio sueco, los dos países europeos que no cerraron nunca los colegios pero sí implementaron medidas de mitigación para fomentar la higiene de manos, la distancia física o el que los niños quedaran en casa si estaban enfermos, no han presentado más casos de hospitalizaciones pediátricas por covid-19. Por lo tanto, concluyen, cerrar los centros educativos no es una medida efectiva de control de la transmisión comunitaria de la pandemia.
Además, una nueva investigación realizada por el Public Health England ha revelado que los profesores están propagando la covid-19 más que sus alumnos en Inglaterra, según ha publicado el diario The Times.
En junio y julio, 200 personas, entre niños y personal docente, se vieron afectados por la enfermedad. Durante el mismo período, se registraron 25.470 casos en toda Inglaterra, por lo que el número de casos en colegios no llega al 1%.
En concreto, dos tercios de los brotes que han surgido en las escuelas ha sido por transmisión de profesores a profesores o de estos a sus alumnos. En junio, el número de escuelas abiertas estaba entre 20.500 y 23.400, y el número de alumnos aumentó de 475.000 a 1.646.000.