MURCIA (EFE). El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha advertido este miércoles a los empresarios que tengan “cuidado” a la hora de solicitar ayudas para implantar ERTES relacionados con los nuevos aranceles del Gobierno de Estados Unidos a la Unión Europea, ya que la contracción de los mercados se va a convertir en un problema “estructural” que obligará a hacer despidos.
“Mientras no se arregle el mercado, vamos a tener que ajustar, nos guste o no nos guste”, ha subrayado durante su intervención en la clausura de la asamblea general de la patronal murciana, CROEM, donde ha insistido en que los ERTE son una figura adecuada para situaciones “accidentales”, pero no “estructurales”, como considera que es la coyuntura actual a raíz de la implantación de los aranceles aprobados por Estados Unidos para los países europeos y que entran hoy en vigor.
Estos aranceles, ha subrayado, suponen una “ruptura global del multilateralismo y del atlantismo”, por lo que la Unión Europea debe actuar desde la unidad para hacerles frente.
Sin embargo, ha puesto el foco en que los acuerdos en Bruselas suelen alargarse en el tiempo por la diversidad de los países socios, y una vez aprobados, hay que llevarlos a cada uno de los estados miembros y, dentro de éstos, a sus comunidades autónomas, mientras que “hay otros que deciden en un día”.
Garamendi ha insistido en que la imposición de los aranceles llevará a una contracción generalizada de los mercados, por lo que la unidad de acción de Europa será crucial también en la búsqueda de mercados alternativos, así como en la de mejorar su autonomía en la dependencia de materias primas.
Por ello, ha insistido en que las dificultades que genera esta situación “no serán flor de un día, van a durar tiempo” y se harán estructurales.
En cuanto al paquete de ayudas aprobadas por el Gobierno para apoyar a los empresarios exportadores, Garamendi ha valorado la “sensibilidad” con estos sectores, pero ha recordado que los fondos no son subvenciones, sino avales para acudir a financiación bancaria, y ha advertido de que muchas empresas “están agotadas” y sufren todavía el peso de los créditos suscritos a raíz de la pandemia del coronavirus.
El presidente de la CEOE ha advertido este miércoles a las pequeñas empresas del país del riesgo de acogerse a ayudas públicas condicionadas a no realizar reestructuraciones en caso de que los aranceles impuestos por Estados Unidos se conviertan en un "tema estructural".
"Tengo que avisar a las empresas, especialmente a las muy pequeñitas, que mucho cuidado con tener esas ayudas porque si es estructural se van a ver abocadas al cierre", ha dicho Garamendi en un contacto informativo en el marco de la 47 Asamblea General de la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM).
A su juicio, el problema de los aranceles "no es un tema nacional ni de Murcia, sino fundamentalmente europeo", y, por tanto, "será Europa la que tenga que decidir la política internacional y las medidas a tomar".
El presidente de la CEOE ha coincidido en esta asamblea de CROEM con el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, en un momento de cierta tensión entre ambas organizaciones ya que la patronal de las pymes celebrará elecciones para su presidencia antes del verano y Cuerva deberá competir por el cargo con la presidenta de los empresarios de Valladolid, Ángela de Miguel, que cuenta con el respaldo de la CEOE.
Garamendi ha insistido en que ha saludado a Cuerva públicamente durante el acto, en el que sin embargo no han coincidido, ni en el turno de discursos de la clausura (Cuerva no ha intervenido en el mismo), ni en la atención a los periodistas. “No hay ningún problema. Hay unas elecciones en Cepyme y es algo habitual que pasa en todas las organizaciones empresariales”, ha resumido. Así pues, ha defendido que este tipo de procesos representa "la democracia de las organizaciones empresariales", y ha insistido en que lo que quiere es que esta organización esté liderada por una persona "con ganas de trabajar" para las pequeñas y medianas empresas.
Asimismo, ha exigido al gobierno central que el reparto de las ayudas que se han puesto en marcha para paliar la crisis provocada por los nuevos aranceles de la administración Trump se lleve a cabo en función del volumen de empresas afectadas en cada comunidad autónoma y no por negociaciones políticas.
El líder de la patronal ha reaccionado así al anuncio de Junts de que ya ha pactado con el Ejecutivo que un 25% por ciento de los fondos aprobados se queden en Cataluña.
En declaraciones a los periodistas tras participar en la clausura de la asamblea general de la patronal murciana CROEM, Garamendi ha subrayado que “hay algo que no se entiende” en ese compromiso, puesto que las ayudas no se pueden negociar “desde el punto de vista del territorio”, sino en proporción al sector empresarial afectado por los aranceles en cada uno de ellos.
También el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, se ha mostrado en el mismo acto muy crítico con ese supuesto reparto de fondos, que el Gobierno central ya ha desmentido, y ha advertido de que “en una situación de conflicto comercial global” cómo esta, el Ejecutivo central no debería estar pensando en sus intereses políticos.
“Yo no sé cuántos fondos vienen a la Región de Murcia, pero hay un señor que ya sabe lo que va para Cataluña”, ha lamentado antes de recordar que el Ejecutivo fijó mañana como fecha para reunir a las comunidades para abordar el reparto.
López Miras ha hecho un llamamiento a “defender los intereses de los empresarios” y activar ayudas, pero también a “reactivar la vía diplomática” porque, ha dicho, aunque Donald Trump “se ha equivocado” con esta medida, “Estados Unidos no es un enemigo” y hay que mantener su mercado, lo que requiere de una respuesta “coordinada”, “desde la unidad con los empresarios y las comunidades autónomas”.