MURCIA. Pedro León Sánchez Gil, jugador muleño de 38 años, seguirá capitaneado al Real Murcia al haber prolongado su contrato con el club grana, en el que lleva tiempo diciendo que se retirará aunque no sabe cuándo y espera hacerlo tras haber ascendido a Segunda División, y para ello defenderá la elástica al menos una campaña más y con la particularidad de que percibirá el salario mínimo establecido por convenio -25.000 euros brutos anuales-, que además serán donados a la cantera, de la que él salió.
La entidad presidida por Felipe Moreno oficializó este lunes la continuidad de uno los símbolos del murcianismo y el jugador no ocultó su satisfacción por el acuerdo alcanzado. El de Mula, donde nació el 24 de noviembre de 1986, alargó su vínculo hasta junio de 2026 con el equipo compitiendo en el grupo 2 de la Primera RFEF y el firme propósito de dar el salto que se le resistió el pasado curso en la promoción de ascenso con la dolorosa derrota por 0-1 ante el Nástic de Tarragona ante 31.003 espectadores que llenaron a reventar el estadio Enrique Roca.
"Tenía claro que tenía que intentarlo un año más. Creo y estoy convencido de que el equipo me necesita en el terreno de juego y ahí estaré, como siempre, enfocado al 100% para luchar por ese ansiado objetivo", indicó el futbolista y dejó claro que conocen el camino para lograrlo.
"Sabemos que no va a ser fácil pero vamos a darlo todo para que así sea y estamos convencidos que se va a dar", declaró el veterano centrocampista, quien mostró su generosidad y su amor a los colores al no suponer su renovación un gasto para las arcas murcianistas.
Pedro León, quien continuará con su papel de líder tanto dentro del campo como fuera de él, ofreció una rueda de prensa con el nuevo contrato ya firmado y estuvo acompañado en el acto por el director deportivo, Asier Goiria; y por el vicepresidente, Juanjo Fernández.
"Estoy aquí para comunicar que voy a seguir intentando un año más el ascenso al fútbol profesional con el Real Murcia. Hace 18 me fui de aquí con un ascenso a Primera División siendo importante para el club y así lo dijeron los números esa temporada. Hace tres volví y vine a Primera RFEF para a intentar ascender y, después de la odisea pasada, devolverlo al lugar en el que tiene que estar", apuntó.
"Lo fácil hoy hubiese sido desistir, dedicarme a estar con mi familia, mi mujer y mis hijos, y disfrutar de ellos este verano. Sin embargo, creo que eso no hubiese sido un buen ejemplo para mis hijos y creo que habría sido una decisión de la que me habría arrepentido y por eso he decidido seguir", añadió.
También hay motivos puramente futbolísticos para su continuidad. "Creo que el club me necesita en los terrenos de juego estoy convencido de que con mi ayuda el club será más fuerte. Ha sido una decisión muy meditada pero que tenía muy clara. Después del partido frente al Nástic me encerré con mis compañeros en el vestuario, muchos lloraban y estábamos jodidos, pero les di las gracias por el compromiso, por el esfuerzo y por haberse dejado hasta la última gota de sudor por cumplir el objetivo", expuso.
Esa derrota llenó de amargura al murcianismo y Pedro no quería retirarse con esa sensación. "Después de lo que pasó lo único que dije a mis compañeros es que había que levantarse y que yo sería el primero que estaría con ellos. Cuando Alberto González se levantó y me dio las gracias me di cuenta de que tenía poco que pensar. El año pasado Felipe Moreno me dio la opción de decidir por mí mismo porque quería hablar con la dirección deportiva, con el entrenador y el club y saber que si ellos querían yo estaría aquí dispuesto a remangarme y a luchar un año más. Hablé con todos y estaban de acuerdo y así llegamos a la renovación", agregó.
Sobre su conversación con Joseba Exteberria, nuevo técnico grana, explicó lo siguiente: "Joseba vivió algo parecido en el Athletic de Bilbao y por ello entendió mejor mi situación. Él, evidentemente, fue más grande que yo como jugador estando muchos años en el Athletic y en la selección española pero hablamos de fútbol y fue una conversación positiva".
Y con relación a su estado físico y las perspectivas que se plantean en ese sentido a un futbolista que en cuatro meses cumplirá 39 años manifestó que confía en dar el nivel. "La segunda vuelta de la pasada temporada no fue buena aunque no creo que fuese un problema físico. Es verdad que lucho contra un rival invencible que es la edad pero creo que puedo mejorar este año y por eso renuevo", comentó. "Si hago un año como el del curso 2022/2023, en el que metí 15 goles, y Asier quiere pues quizás siga pero hay una alta probabilidad de que sea mi último año y lo importante no soy yo sino que lo importante es el equipo y que consigamos el objetivo", apostilló.