MURCIA. Prueba de madurez superada con creces. Carlos Alcaraz Garfia, visitante en Roma frente al italiano Lorenzo Musetti, le ganó por 6-3 y 7-6 (4) en 2 horas y 2 minutos del que fue su partido número 100 en Masters 1.000. El triunfo 77 en esa lista le valió el acceso a la final, que disputará el domingo a las cinco de la tarde sobre la tierra batida del Foro Itálico ante otro transalpino como Jannik Sinner, que es el primer jugador del mundo en la actualidad; o el estadounidense Tommy Paul.
El sexto enfrentamiento entre el de El Palmar, de 22 años y que terminará el torneo y llegará a Roland Garros como número 2 de la ATP, y el de Carrara, de 23 y que es el noveno, se presentaba con un 4-1 a favor de Carlos, quien buscaba su quinta victoria ante el transalpino. La obtuvo.
En un encuentro marcado por el viento, algo muy incómodo para la práctica del tenis, el murciano comenzó con break a favor en la primera ocasión que se le presentó y luego tuvo complicaciones con su saque. No en vano, Musetti dispuso de hasta tres bolas de ruptura pero el español las levantó y estableció el 2-0 frente a un rival demasiado errático. CA continuó apretando al resto y dispuso de otras dos opciones para estirar su ventaja. Musetti las salvó para evitarlo pero la inercia del choque no iba a cambiar. Alcaraz, más seguro y jugando sin alardes -las rachas de aire es lo que aconsejaba-, se mostraba superior y así llegó al 4-1 con un servicio ganado de forma solvente y con su segundo quiebre en el choque, algo que hizo rematando con una buena subida a la red.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López parecía tener controlada la situación pero se enredó, algo ya habitual en sus partidos, lo cual aprovechó su rival para recortar distancia con su primera ruptura consumada y luego llegando al 4-3 y eso que Carlos tuvo hasta tres posibilidades para conseguir el contra break. El día era para asegurar más que para forzar, lo cual puede sonar a antinatural en el caso del murciano, pero lo entendió bien y, con su saque en blanco, se quedó a un juego de llevarse el set. Lo sumó nuevamente al resto y aprovechando los errores de un Musetti desesperado y que rompió su raqueta golpeándola contra el suelo. Tras 54 minutos el primer set fue español.
La segunda manga arrancó de forma inesperada sucediéndose las rupturas. El primero en sorprender fue Musetti, luego respondió Alcaraz y más tarde el italiano puso el 1-2 a su favor. Servir era sinónimo de perder hasta que Lorenzo rompió esa dinámica y logró el 1-3 y además en blanco. Carlos respondió para evitar que su rival se despegara más en el marcador pero todavía hubo un 2-4. La emoción fue en aumento y el favorito, que debió esperar casi una hora y media de encuentro para anotarse su primer ace -su rival no llevaba ninguno- resistió y más que eso. Logró el 4-4 realizando un derechazo con el que se quedó a gusto.
La rabia se apoderó de Musetti, penalizado con un segundo warning, y eso dio un punto gratis a Carlos, quien se hizo con el 5-4 por la vía rápida. No obstante, LM reaccionó para evitar ya la derrota y la posibilidad de tie break asomaba. Se lo aseguró Alcaraz pese a cometer dos dobles faltas y acto seguido bien pudo dar el golpe definitivo. De hecho, tuvo una bola de partido que no hizo buena y, por lo tanto, se llegó a la muerte súbita.
En el desempate el español se puso en plan mandón (2-0, 4-1 y 5-2). La situación era ideal para él pues tenía dos saques para cerrarlo pero Musetti llegó al 5-4. No le tembló el pulso y fue el palmareño el que se llevó al resto los dos últimos puntos, el definitivo con otro derechazo que no volvió, de un choque en el que logró 87 por los 77 de su contrincante. Tras 1 hora y 8 minutos más se ganó el puesto en una final que disputará frente a Sinner o Paul. Al de San Cándido, de 23 años y que lidera el ranking, se midió en diez ocasiones en el circuito con un 6-4 a favor en ese cara a cara y al de Nueva Jersey, de 27 y que es el duodécimo del ranking, se enfrentó seis veces con un 4-2 también de su lado. Contra uno u otro se viene partidazo.