MURCIA. Volverá a luchar por el título en la final de Roland Garros tras vencer un partido que acabó con ocho juegos seguidos ganados y eso después de haberlo pasado mal. Carlos Alcaraz Garfia se deshizo del italiano Lorenzo Musetti remontando para imponerse por 4-6, 7-6 (3), 6-0, 2-0 y retirada del transalpino en un choque de semifinales que duró 2 horas y 25 minutos en la pista Philippe Chatrier con 15.000 espectadores abarrotando sus gradas y que se jugó bajo techo -echó la capota ante la amenaza de lluvia-. Su rival del domingo a las tres de la tarde en la pelea por la Copa de los Mosqueteros saldrá del choque entre otro italiano como Jannik Sinner y el serbio Novak Djokovic.
Era el séptimo duelo entre Alcaraz, de 22 años y número 2 del mundo, y Musetti, de 23 y que ocupa el séptimo puesto en el ranking ATP. En el primero de los seis precedentes ganó el de Carrera y en los cinco siguientes, que ya son seis, lo hizo el de El Palmar.
Este nueva entrega comenzó con Carlos disponiendo de un 30-40 como primera opción de break pero no la materializó y el encuentro fue avanzando con la lógica de que el sacador se llevaba el juego con seguridad. De ahí que se registraran sendos empates (1-1 y 2-2). El murciano apretaba pero su adversario resistía.
En el séptimo juego tuvo otra posibilidad de quiebre que tampoco hizo buena y continuó por detrás. Así siguió con el 4-5, marcador con el que se dispuso a servir por quinta vez. El favorito, que no había concedido ninguna opción de ruptura a su oponente, se vio de repente con un 15-40 y cometiendo errores justo en un momento delicado. Un fallo más le hizo ceder el servicio y, con ello, perder el primer set después de 47 minutos en los que terminó de encontrar su ritmo.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López, con unas prestaciones claramente inferiores a las de los cuartos ante el estadounidense Tommy Paul, tenía que remontar ante un Musetti dispuesto a seguir creciendo en su convicción. De hecho, éste comenzó la segunda manga asegurando el saque (0-1), pero a partir de ahí empezó a aparecer el Alcaraz que tan buenos había dejado desde que arrancó su participación en el torneo. Así, igualó echando la pelota al aire y luego, esperándola, logró el break y además en blanco. Gritó y apretó el puño para celebrarlo.
Para Carlos era cuestión de mantener esas buenas sensaciones pero volvió a fallar con su saque y Lorenzo, muy firme y seguro con su característico revés a una mano, puso el 2-2. El azzurro volvió a mandar (2-3 y 3-4) con Alcaraz corriendo demasiado detrás de la bola, lo cual en su caso no suele ser buena señal.
En todo caso, agarrándose a la pista, igualó aunque alternó buenos golpes con errores no forzados y eso le impidió voltear la situación a su favor en ese instante. Y eso que tuvo dos oportunidades más de break para el 4-5 que no concretó.
Quien la sigue la consigue y CA por fin alcanzó su propósito. Empató a 5 y, al resto, obtuvo la nueva ruptura que andaba buscando. Con el 6-5 y tras haberlo pasado regular tenía la ocasión de llevarse la manga pero se volvió a complicar y, con cuatro puntos seguidos ganados por Musetti, se disputaría el tie break.
En la muerte súbita el español empezó bien (3-0) y por fin encontró el camino para colocar el 6-1. Aunque el transalpino aguantó hasta el 6-3 el set acabó llevándoselo después de 1 hora y 6 minutos de idas y venidas.
Es como si Carlos se hubiera quitado un gran peso de encima e inició el tercer parcial llevándose el servicio en blanco. El encuentro era otro muy diferente al que se estaba viendo y el de El Palmar se lanzó a por el triunfo. Cinco juegos seguidos cediendo sólo cuatro puntos en ellos, y 5-0. Encima Musetti empezó a sentir dolor en su muslo izquierdo, aunque seguramente le dolía más cómo se le había puesto un partido que había estado más o menos controlado por su parte. Con un revés el de El Palmar llegó al 6-0, un rosco que consiguió en apenas 23 minutos y con un 24-5 en puntos que reflejaba en lo que se había convertido el choque.
Y así iba a seguir aunque no mucho más tiempo. Alcaraz logró otros dos juegos en nueve minutos más y con el 2-0 en el cuarto set Musetti decidió abandonar. El murciano pidió al público un aplauso para el italiano y el vigente campeón logró el pase a la final, la segunda consecutiva en París tras la que se llevó el pasado año frente al alemán Alexander Zverev.
El 104-79 del puntaje general puede esconder los problemas que tuvo CA y que a buen seguro serán más el domingo ya sea contra Sinner, de 23 años y líder del ranking internacional -sólo él está por delante del palmareño- o frente a Djokovic, veterano de 38 y que ahora es sexto. La leyenda de Belgrado, ganador de 24 Grand Slam, tres de ellos en la capital francesa, ahí sigue y el de San Cándido es, hoy por hoy, el rival más cualificado que se puede tener enfrente.