Entrevista

Murcia Plaza Cultura

Álvaro Benito (Pignoise): "La música no puede ser algo rutinario, esto tiene que ser algo extraordinario"

1 / 3
  • Álvaro Benito durante un concierto en el Movistar Arena.
Suscríbe al canal de whatsapp

Suscríbete al canal de Whatsapp

Siempre al día de las últimas noticias

Suscríbe nuestro newsletter

Suscríbete nuestro newsletter

Siempre al día de las últimas noticias

Es una de las bandas más reconocibles de la música española. Raro es que usted, querido lector, no haya escuchado alguna vez alguna de las melodías de esta banda que se dio a conocer gracias al éxito de la serie de televisión Los Hombres de Paco. Fue una alianza provechosa, ya que a Pignoise el escaparate televisivo le sirvió de trampolín y, a la serie, la sintonía le ayudó a ser reconocible y recordada. Ahora, 20 años después, el grupo que lidera Álvaro Benito vive "el mejor momento de su carrera". Seguidores de todas las edades se han sumado a esta banda que, a base de trabajo, han logrado sobrevivir durante casi un cuarto de siglo.

 

 

 

¿Qué sentís ahora después de parar y volver? Tenéis un éxito brutal. Lo dejáis, volvéis y el mismo éxito.

 

Pues la verdad que muy agradecidos. Porque yo creo que ahora ya sí es cuando puedes hacer una valoración real de lo que es una carrera. Te da tiempo a mirar atrás y ver todo el camino recorrido. Ves que las canciones se han quedado y eso creo que sucede o no sucede. Tampoco depende mucho de ti.

 

Y bueno, como te decía, pues la verdad que estamos muy agradecidos de que todavía, después de tantos años, estamos en el mejor momento de la banda. Es curioso, pero había esa incertidumbre después de los seis años últimos sin tocar. Y de repente, una vez que volvimos, ha ido creciendo la banda hasta que este año ha sido nuestra mejor gira desde que existimos.

 

Vuestra última canción, Atardecer, dice, “Cada vez cuesta más resucitar”. Me recordaba un poco también a vuestra historia, que no era fácil volver. ¿Qué hizo que volvierais?

 

Pues que yo dejé de entrenar, básicamente. Yo estaba entrenando en la cantera del Real Madrid, entonces eso me impedía compatibilizarlo con la carrera musical. Y bueno, se juntaron las dos cosas. Dejé de entrenar y yo creo que había pasado el tiempo prudencial para que el cuerpo pidiera marcha. Había ganas de retomar.

 

Y entonces retomamos a ver dónde nos llevaba el camino de nuevo. Ya te digo que había bastante incertidumbre, ¿no? Porque nunca se ve después de seis años qué ha pasado. Porque los tiempos cambian, la gente crece, hay nuevo público, nuevas bandas. Y bueno, volver otra vez a meter la cabeza en el engranaje y en la industria pues es complicado y la verdad es que tuvimos suerte. También es cierto que ha sido de una forma progresiva desde 2019. Hemos sido creciendo cada año. Las giras han sido mejores, recintos más grandes.

 

Claro, tras el COVID hay una fiebre por los festivales, por los conciertos, por salir, por disfrutar… ¿Esa ola os ha venido bien también para dar un impulso a la banda?

 

Pues no sabría decirte. Es cierto que la música en directo atraviesa un momento de salud muy bueno. Eso beneficia a todos los artistas. Siempre es un punto a favor, claro que sí. Lo que pase de puertas para afuera ya no depende de ti. Si la gente te elige, pues bienvenido sea, pero tú tienes que intentar hacer las mejores canciones posibles, dar buenos shows y transmitir esa energía. No perder esa energía sobre todo de los comienzos. Yo creo que no se puede convertir en algo rutinario. Esto siempre tiene que ser algo extraordinario.

 

Percibo, no sé si lo percibes tú también, un boom por lo millennial. El caso de vuestra banda, de la de Despistaos, también con una trayectoria parecida a la vuestra. Que también tuvo un boom, desapareció y luego ha vuelto.

 

No, no necesariamente es de lo millennial. Lo que no tenía mucho sentido en España es que por ejemplo bandas que en los 80 o los 90 eran buenísimas hubiesen desaparecido del mapa. Ahora afortunadamente todas estas bandas de los 80 también están con mucho trabajo y volviendo a tocar. Que es como debe ser. Al final las canciones que se quedan, pues se quedan para siempre. Sucede con la música internacional y sucede con la música nacional. Creo que hay canciones que perduran y otras que no perduran. Eso lo dije el público. Pero no sé.

 

Yo la verdad que no entiendo muy bien lo que es ser un millennial, son conceptos que a mí se me escapan. Yo hago música y luego voy a dar conciertos. Entiendo que hay canciones que se quedan. Y ya está, igual que la gente sigue yendo a ver a Hombres G, sigue yendo a ver a Loquillo, Andrés Calamaro… Y que me alegro mucho que así sea.

 

 

Me sorprende mucho ver a gente del año 2000 cantar vuestras canciones sin haberlas vivido, entre comillas. Cuando es vuestro boom, cuando aparecéis, ellos eran críos, eran bebés. ¿Qué tenéis para que esas canciones ellos las hagan también como suyas, como propias?

 

Estoy de acuerdo. Mira, es lo que más nos sorprendió en nuestro regreso. La cantidad de gente joven, súper joven, que se había sumado a nuestro equipo. Que se sabía las canciones y no le encontrábamos explicación. Porque esta gente tendría cuatro años. Cuatro años cuando nosotros estábamos empezando a darnos a conocer. Así que bueno, no sé, ya te digo que hay canciones. Pues supongo que las canciones que tienen algo, pues da igual que la generación que sea.

 

Yo pongo siempre el ejemplo de los Hombres G que llevan 40 años en los escenarios. Estoy seguro que un chico de 12 años escucha ahora Sufre mamón o Venecia o Voy a pasármelo bien y le sigue gustando. Y da igual de qué generación sea, que lo haya vivido en su momento o que lo viva ahora. Pues afortunadamente tenemos algunas canciones que tienen ese efecto. Y que dure, ¿no? Ojalá que las próximas generaciones también nos puedan ir descubriendo y enganchándose en lo que hacemos. Eso yo creo que es lo más bonito de cuando eres creador. Por ejemplo en mi caso, cuando creas algo y llega a conectar con la gente, pues es maravilloso.

 

Llegas a la música como un plan B de vida más o menos. Vienes del fútbol, todos conocemos tu trayectoria, te lesionas y empiezas a tocar. Yo recuerdo que decías en una entrevista, que creo que era en Hotel Jorge Juan, que en vuestros inicios os dicen, “no tocáis bien todavía, pero tenéis algo”. ¿Os lo creéis ya?

 

Sí, claro, hemos aprendido la profesión. Ojalá en nuestros inicios hubieramos sabido lo que sabemos ahora, a todos los niveles. A nivel técnico, por supuesto, tener control musical y técnico de la situación; a nivel de producción de tus discos… que lo llevo haciendo yo ya 12 o 15 años. Pero bueno, la vida es un proceso. Yo empecé más tarde de lo habitual porque venía de ser futbolista.

 

Pero sí, nos decían eso, que “estáis muy verdes”, por no decir que sois muy malos, pero nos decían que las canciones tenían algo. Desde que me puse a hacer canciones, tenía esa parte creativa de que me salían bonitas melodías. Siempre, con pocos conceptos de armonía ya me salían bonitas melodías.

 

Sí que nos decían esto cuando escuchaban nuestras primeras maquetas, pero también era un impulso a nosotros para seguir. Es algo que yo sí percibía, fíjate, yo sabía que tenía otras limitaciones, como guitarrista, como cantante, que he tenido que trabajar mucho en eso, pero sí sabía que tenía una parte creativa para las melodías, que sigo manteniendo, que la verdad es que tengo esa facilidad a hacer canciones.

 

Vuestro boom, parte de daros a conocer, es por Los hombres de Paco, por la serie. Que también tuvo un poco de lotería el éxito de la serie en sí, porque empieza con una audiencia floja, paran en la grabación, la reescriben, y ya pega un tirón, es curioso también la historia un poco de la serie y vuestro grupo, que ha ido muy a la par también.

 

Sí, de hecho, cuando la paran, hacen encuestas para hacer un rediseño de la serie, como tú dices, y me reúno con Álex Pina (creador de la serie), y a mí me dicen que lo que mejor ha logrado salir de las encuestas es la música. Entonces, a partir de ahí, cuando vuelve la serie, es cuando ya grabamos un disco completo con ellos, y empiezan a aparecer otras canciones, además de la sintonía. Luego, ya sabes, hay cientos de series, y las músicas no trascienden, pero tuvimos suerte, ya te digo, la canción, pues gustó, esta música gustó, el hecho de que Te Entiendo fuera también con la trama de Sara y de Lucas, nos catapultó.

 

Fue la oportunidad de darnos a conocer, que seguramente por otras vías no hubiésemos tenido la oportunidad, ya que las discográficas siempre nos decían que nuestra música en España era muy minoritaria.

 

 

Recuerdo que El sueño de Morfeo también se dio a conocer a través de Los Serrano. Las series eran un poco el YouTube de aquellos momentos, ¿no? Las bandas se daban a conocer por esa vía.

 

Siempre, siempre. Igual que en los 80 salían en el Tocata, te veían 6 millones de personas y era una promoción increíble para las bandas, luego ya no había programas de música, aparecer en una serie de mucha audiencia, te catapultaba y la música gustaba. Entonces, bueno, pues mira, la verdad que fue una oportunidad de lo más casual, una cosa muy random, que nos vio un tío tocar ahí en un concierto de teloneros de Modestia Aparte. Ya tenían escogido otro grupo y lo cambiaron por nosotros. Bueno, fue una historia rocambolesca que nos ha llevado a tener la posibilidad de tener una carrera musical.

 

¿Tú cómo describirías la evolución de la banda a nivel musical, a nivel de sonido?

 

¡Uf! Difícil. Creo que nosotros encontramos una manera de expresarnos ya a lo que se puede considerar el segundo disco, que para nosotros es el primero, que es Esto no es un disco de punk, que estamos en proceso de regrabarlo para lanzarlo en ediciones limitadas en vinilo y demás. Ahí creo que ya encontramos una manera de expresarnos, de cómo queremos sonar, de mi manera de componer, un poco de una forma casi inconsciente, porque ya te digo que nos salía todo de forma intuitiva. No es como ahora que sé a dónde quiero llegar exactamente cuando me pongo a hacer una canción, incluso en los sonidos, en todo.

 

Y a partir de ahí, pues yo creo que también el proceso vocal, porque yo no tenía ni idea de cantar, me puse a cantar sin tener ninguna técnica. Luego ha sido un proceso de aprendizaje con el paso de los años, he ido controlando mi voz, pero obviamente tengo que mantener una coherencia.

 

Nosotros siempre decimos que tienes que mantener una coherencia sonora o sónica con tu pasado, ¿no? Obviamente tienes la libertad de hacer un disco electrónico, pero nosotros creemos más en mantener una coherencia y cada vez es más difícil hacer algo que sea acorde con la edad que ya tienes, que sea una evolución, que se parezca a lo anterior, pero que sea lo suficientemente diferente como para que sigas seduciendo a tus fans… Yo pienso que es una evolución lógica el haber mejorado como instrumentistas, de crecer como seres humanos, de sumar años, pero siempre intento que mantenga una coherencia, que la gente lo escuche y diga, esto es Pignoise.

 

Te quería preguntar ya un poco a nivel más personal, porque creo que puedes ser un ejemplo para muchísima gente. Tenías un plan A de vida que te iba muy bien, eras jugador del primer equipo del Real Madrid, jugando bastantes minutos, te lesionas de por vida para la élite y encuentras un plan B de vida en la música. ¿Qué le podrías decir a esa gente, a quien tenga un plan A de vida y que no les salga, que se frustra, que ve que no les salen las cosas?

 

Bueno, es difícil porque las personas reaccionamos de formas muy diferentes ante los mismos estímulos, ante las decepciones, ante las tragedias de cualquier tipo. Yo siempre puedo decir el aprendizaje que saqué yo.  Primero, que no puedes dar nada por sentado en esta vida, no puedes tener todas las patas de tu vida en la misma mesa. Si esa mesa se rompe… Pues no, siempre tienes que estar abierto a que las cosas puedan cambiar y no pasa nada, el cambio a veces es bueno. Y sobre todo a no mirar con autocompasión para atrás.

 

A todos nos van a pasar cosas buenas, cosas menos buenas, incluso cosas horribles. Así es la vida y mirar para atrás con autocompasión creo que no ayuda a nadie. Yo obviamente tuve que luchar en mis cosas y cada uno tiene sus batallas vitales, pero sobre todo yo he aprendido también a relativizar un poco qué sucede.

 

En mi caso, ya te digo, no fue una tragedia de que se te muere un hijo, por ejemplo, que eso es una cosa ya, obviamente, palabras mayores. En mi caso fue una tragedia vital para mí porque no pude seguir jugando al fútbol cuando había llegado a lo más alto que se puede llegar. Pero aprendí a relativizar también, a decir que se puede ser feliz de otras maneras y no pasa absolutamente nada.

 

No vivís exclusivamente de la música. ¿Cómo os organizáis? Porque algunos tenemos solo un trabajo y nos cuesta.

 

Pues difícil, la verdad que la logística de grabar un disco que hemos hecho ahora pues ha sido complicado, nos tenemos que adaptar o sacar tiempo del que no hay. Yo en mi caso pues con poco tiempo para mí, no tengo apenas vida social, paso mucho tiempo solo porque las canciones hay que hacerlas, porque hay que estudiar, hay que estudiar la guitarra…Entonces yo paso mucho tiempo dedicándole a la música solo a mi casa. Entonces sacrifico muchas otras cosas, pero bueno, lo hago encantado porque lo que hago me encanta. Pero sí, es complicado porque bueno, tienes que sacar tiempo seguramente de otras cosas que te gustaría hacer, pero tienes que sacrificarlas por esto, que es un privilegio.

Recibe toda la actualidad
Murcia Plaza

Recibe toda la actualidad de Murcia Plaza en tu correo