MURCIA (Efe). El Ayuntamiento de Murcia cerró el primer trimestre de 2024 con un remanente negativo de tesorería de 147,8 millones de euros, una cifra sobre la que los grupos de la oposición (PSOE y Vox) han manifestado su preocupación mientras que el PP ha defendido que es fruto de la mala gestión del anterior equipo, por lo que se está trabajando intensamente por “ordenar las cuentas”.
La cifra está recogida en los informes de la intervención municipal sobre estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera y sobre ejecución del presupuesto a 31 de marzo de 2024, y ha generado controversia entre los grupos, que han arrancado el pleno mensual en un clima de compañerismo y apoyo al alcalde, José Ballesta, al que han recibido con un aplauso.
El primer edil se ha sometido recientemente a una operación quirúrgica, por lo que a su llegada al pleno ha sido saludado por los portavoces de los tres grupos municipales, que le han manifestado su afecto.
No obstante, ese clima de acuerdo no se ha trasladado al debate sobre el informe de liquidación presupuestaria, con el que ha sido muy crítico el portavoz del PSOE, Ginés Ruiz, que ha lamentado en primer lugar que el presupuesto municipal de 2024 se ha sacado adelante sin haber aprobado aún la liquidación de las cuentas de 2023, si bien su resultado ya es conocido y arrojaba un remanente negativo de tesorería de 93,4 millones de euros.
En la liquidación del primer trimestre de 2024 la cifra del remanente ha aumentado hasta los 147,8 millones de euros, mientras que la deuda municipal alcanza los 271 millones, y el informe de intervención estima que los ingresos están sobreestimados en 25 millones de euros.
“La situación es muy comprometida”, ha subrayado Ruiz, que ha insistido en que los datos “exigen que haya un cambio de actitud” en el Consistorio y dejar de hacer inversiones millonarias en asuntos como la colocación de estatuas (el presupuesto contempla 1,2 millones para ello) o la contratación de flores de temporada para los jardines (2,6 millones adicionales al contrato de parques y jardines).
En la misma línea, el concejal de Vox José Mariano Orenes ha calificado de “preocupante” el remanente negativo que, ha lamentado, se viene arrastrando y aumentando desde 2021 sin que se hayan tomado medidas para atajarlo, ni por el anterior equipo de gobierno del PSOE ni por el actual.
En ese sentido, ha lamentado que las cuentas de 2024 se presentaron como una herramienta para recuperar la senda de la estabilidad y solo en el primer trimestre ya arrojan el abultado remanente negativo y apuntan a un déficit por la incorrecta estimación de los ingresos.
Además, ha afeado al gobierno que defienda estas cuentas para garantizar los servicios públicos, porque éstos, ha lamentado, “son los mismos que hace 15 años” y no se ha hecho nada para mejorarlos.
Por su parte, el concejal de Gestión Económica, José Francisco Muñoz, ha puesto el foco en el incremento del remanente negativo de tesorería durante los dos años de mandato del PSOE, y ha lamentado que no se tomaran entonces medidas para revertirlo, puesto que del plan de saneamiento que se aprobó entonces no se cumplió ninguna media.
El edil ha defendido que el actual gobierno ha aprobado dos presupuestos en seis meses: los del año 2023, para garantizar la prestación de los servicios y el pago de las facturas, y el de 2024, que permitirá dar cobertura a todas las prestaciones, asumiendo el incremento de los contratos públicos, por lo que ha apelado a la “responsabilidad” de todos los grupos en este sentido.