Los vecinos de El Carmen recogen 10.000 firmas contra el plan de movilidad y preparan más protestas

MURCIA. Cierran mi barrio', una asociación que aglutina a muchos vecinos y comerciantes que se oponen a la restricción del tráfico y a la supresión de varios centenares de aparcamientos en el Barrio de El Carmen de Murcia, no se rinde. Tras asegurar que el Ayuntamiento no ha respondido a sus demandas, la plataforma convocó una manifestación el pasado sábado. Este miércoles a las 12 entregarán 10.000 firmas contra el plan de movilidad al alcalde, José Antonio Serrano, a la vez que anuncian nuevas movilizaciones. 

"No es de recibo que se vayan a eliminar más de 500 plazas en el barrio (1.400 en todo el municipio), sin que se hayan puesto en marcha unos disuasorios para los que ni siquiera hay terrenos ni ubicación pese a la promesa de que estarían en funcionamiento antes del inicio de las obras", destacan.

Los vecinos de varios barrios que se manifestaron critican que se venda como peatonal un proyecto que elimina aceras en Espinardo y las recrece 10 centímetros, o que se venda como verde un plan que, "no sólo no incluye la plantación de ningún árbol, sino que los elimina en cada uno de los barrios, como puede comprobarse en El Carmen (C/ Industria), Espinardo (C/ Mayor) y Vistabella (Avenida de la Fama)".

Reivindican también que se les ofrezcan alternativas, "porque no pueden eliminarse 1.400 plazas de aparcamiento con la promesa de unos disuasorios antes de las obras y que a día de hoy ni siquiera haya terrenos, ubicación o proyecto".

Retan al Ayuntamiento a un simulacro previo

Los colectivos retan al Ayuntamiento a realizar un simulacro de su plan durante una semana, con la restricción de tráfico y la eliminación de plazas de aparcamiento que conlleva, con la promesa de disolverse y apoyar el proyecto si es un éxito y la petición de que el Ayuntamiento se siente con los vecinos para mejorarlo si es un caos.

"Una vez más pedimos al Gobierno municipal que escuche a los vecinos y le volvemos a retar a realizar un simulacro de una semana con la reordenación de viales y supresión de aparcamientos", con la promesa de que si es un éxito seremos los primeros en apoyar el mismo y la petición de que se replantee el mismo "si es un caos".