CARTAGENA. Los trabajadores que la empresa Matersa tiene contratados para prestar los servicios de limpieza en el estadio Cartagonova y el Palacio de los Deportes estudian movillizarse la próxima semana ante los impagos reiterados de sus nóminas por parte de la firma concesionaria de este servicio en ambas instalaciones deportivas propiedad del Ayuntamiento de Cartagena. La firma pachequera se llevó la adjudicación por 169.186,96 euros.
Afirman que, a día de hoy, se les adeuda dos nóminas -agosto y septiembre- y no confían demasiado en cobrar ni una más hasta diciembre, que es cuando se cumple el contrato entre la empresa y el Ayuntamiento de Cartagena. Explican a Murcia Plaza que un día después de que la administración municipal iniciara el expediente de resolución del contrato de limpieza -a comienzos de este mes-, por los reiterados incumplimientos en sus obligaciones contractuales, les fue ingresada la nómina de junio y les enviaron parte del material que necesitan para ejercer su trabajo. Pero esto no ha paliado los problemas, ya que se están encontrando con serias dificultades para seguir trabajando al carecer de algo tan básico como sacos de basura, papel de mano, productos antióxido, limpiacristales o ambientadores. "Fue un envío de urgencia, pero con eso no tenemos para nada", explica uno de los trabajadores que además añade que carecen de la maquinaria necesaria para poder ejercer su labor.
A eso hay que añadir las serias dificultades económicas por las que, afirman, están pasando tras varios meses sin cobrar sus salarios. Aseguran que algunos compañeros tiene un gran problema no solo para pagar la luz, el agua o la vivienda sino incluso para alimentarse, por lo que han decidido elevar sus quejas a la opinión pública para que sepan cuál es la situación y entiendan que no son ellos los que están dejando de hacer sus funciones. Es más, alguno de los siete trabajadores ya ha demandado a la firma por incumplimiento de contrato y su situación deberá resolverse en los Tribunales.
Por eso piden al Ayuntamiento la inmediata rescisión del contrato con Matersa, que sea otra empresa la que asuma la responsabilidad estos meses hasta la extinción del contrato y puedan volver a trabajar en unas condiciones más dignas. Fuentes municipales explicaban que el proceso de expediente de resolución del contrato tiene su tiempo, que la empresa ha hecho alegaciones, y se están siguiendo los trámites administrativos oportunos.
Lo que sí parece claro es que el Ayuntamiento no ejercerá la posibilidad de prorrogar el contrato dos años más a partir de enero. En el caso, si es que las alegaciones no lo dilaten hasta enero, de que rescinda definitivamente este contrato a Matersa, necesitará poner en marcha contratos menores, uno para cada instalación deportiva. De esta forma los siete trabajadores que habían sido subrogados mantendrían sus puestos de trabajo y seguirían llevando a cabo sus labores en mejores condiciones, ya que hasta ahora habían carecido de material para realizar sus labores.