CARTAGENA. Con la llegada del mes de julio, los negocios de Cabo Palos vislumbran una especie de 'oasis'. Un breve periodo de tiempo, especialmente del 15 de julio al 15 de agosto, en los que necesitan hacer una gran facturación que les permita seguir abiertos gran parte del resto de año, cuando la afluencia de gente es notablemente menor a la actual. Por ello, cualquier contratiempo en este periodo de tiempo cuesta más.
El pasado lunes, los comercios de hostelería de Cabo Palos estuvieron cerrados casi en su totalidad. La imagen de un 29 de julio con algunos de los establecimientos más demandados de la costa regional vacíos impactó a muchos vecinos y turistas. La culpa fue de una avería en dos cables subterráneos que dan servicio a casi todo el pueblo. El restablecimiento total de la red eléctrica no se produjo hasta las 23.30 horas. "Algunos negocios pudieron abrir, pero las pérdidas son de más de 20.000 euros", afirma José Enrique Cárceles, vicepresidente de la Asociación de Empresarios Turísticos de Cabo de Palos. Como medida de arreglo, trasladaron camiones con generadores eléctricos. "Del 15 de julio al 15 de agosto es la temporada más alta. Esto nos hace daño no solo a nivel económico, también a nivel reputacional", añade Cárceles, visiblemente enfadado ante una situación que se ha repetido en los últimos años más veces de lo habitual.
Los empresarios de Cabo de Palos aseguran que esto no es la primera vez que sucede, ni es algo producto de un pico de consumo eléctrico. "Nos podrán decir lo que quieran, pero es evidente que esto es un problema que hay que solucionar. En los últimos cinco años ha sucedido tres veces. No se han mejorado las infraestructuras como necesitamos", apunta el vicepresidente de los empresarios de Cabo de Palos.
"Esto en un destino turístico de primer nivel y no puede suceder de manera tan habitual. Como decía, en los últimos cinco años ha pasado tres veces. Iberdrola es un monstruo. Por muchas quejas que hagamos nosotros no vamos ni a rozarles. Hablamos con el Ayuntamiento de Cartagena para intentar que esto no se vuelva a repetir porque a nivel reputacional, tanto que se intenta impulsar a nivel de imagen el turismo en el Cabo, hace mucho daño", asegura José Enrique Cárceles. "Ahora es cuando se genera para el resto del año. Hay una dejadez total en Cabo de Palos por parte del Ayuntamiento. La gestión es inexistente”, apunta el vicepresidente de los empresarios de Cabo de Palos. “Todo es muy precario", subraya.