CARTAGENA. El levantamiento de las restricciones derivadas de la pandemia como las mascarillas o las limitaciones a la movilidad y a la interacción social han generado un sentimiento de recuperar el tiempo perdido. El alto nivel de ocupación en las viviendas en alquiler de cara al verano en la costa cálida augura un gran verano para todo el sector turístico. Una de las patas del turismo son los 'hostels' de la Región, a caballo entre el albergue y el hotel, y generalmente es buscado por aquel cliente que visita la zona con la intención de realizar algunas actividades, como la vela o el buceo.
Constituidos como federación en diciembre de 2019, esperan que el verano de 2022 confirme las expectativas generadas para este verano. Las continuas sorpresas, en forma de oleadas de contagios o de inflación, recomiendan prudencia. "En Semana Santa tuvimos una ocupación del 90%. Para verano nos estamos moviendo ahora mismo en un 70%, por lo que, aparentemente, las perspectivas son muy buenas", señalan desde el Albergue Juvenil y Turístico de San Pedro del Pinatar, perteneciente la Federación de Hostels de la Región.
Pese a las buenas perspectivas para verano, el mal tiempo en este primer mes de primavera está frenando lo que podía haber sido el pistoletazo de salida para la recuperación de estos modelos de alojamientos en la Región. "El tiempo de la primavera nos está lastrando. La Semana Santa nos ha ido bien, pero al final solo son cuatro días", señalan desde Sub-Up, situado en Cabo de Palos y que se caracteriza por ser un alojamiento de referencia para el turista de buceo. "Ahora mismo no tenemos lleno para verano, pero no nos preocupa. Sabemos que en verano nos irá bien", añaden. "Como a todos, el coronavirus nos ha generado muchos problemas", apuntan. Hay que recordar que, durante muchos meses, no estaba permitida la movilidad entre municipios, lo que para negocios que tienen su razón de ser en la movilidad fue fatal.
Aunque se espera un buen verano, el estado del Mar Menor aparece como un problema que podría frenar esas expectativas que los indicadores turísticos apuntan. "La gente pregunta y creemos que de aquí al verano va a pasar algo en la laguna salada. Al final, dependerá del turista. Es el que decide", señalan desde el Albergue JT de San Pedro del Pinatar. "El cliente es sensible a esta situación y si nos toca. Aunque muchos vienen a ver la reserva marina, en el Mediterráneo, cuesta explicarles que, aunque están muy juntos el Menor y el Mediterráneo no son lo mismo. Que uno puede estar bien, estando mal el otro. Eso el que nos llama y nos pregunta. Habrá muchos que directamente no nos llamen porque no conocen bien la historia". El Mar Menor, una vez más, marcará la temporada turística.