WOMEN TALKS: APRENDIENDO DE ELLAS / OPINIÓN

Liderando en Mayúsculas

23/06/2024 - 

MURCIA. Corren tiempos en los que las palabras líder y liderazgo se han colado en nuestras vidas para definir la 'figura' que ha de ser la cabeza tractora de un equipo humano que haga funcionar la empresa. Al finalizar un curso muy interesante sobre este tema, se me ocurren varias conclusiones:

Un buen líder no solo guía, sino que también inspira y fomenta un entorno de trabajo positivo y productivo. Para ello debe conocerse a sí mismo, sus fortalezas y debilidades lo que le permitirá liderar con autenticidad y con un compromiso continuo de mejora.

"Un buen líder debe sacar de su chistera el diálogo y la búsqueda de
soluciones sin culpables"

Este camino de autoconocimiento no es fácil, pero es fundamental. Participar en cursos y talleres de liderazgo es esencial para descubrir nuevas perspectivas y estrategias de liderazgo. Además, aprender de su equipo mediante opiniones y valoraciones fortalece los lazos de confianza y respeto, haciendo que todos se sientan "integrados" en una escucha activa con transparencia y adaptabilidad, ajustándose a las necesidades de cada momento. En otras palabras, debe ser como un junco que se adapta y resiste. La flexibilidad del junco también ayudará a la resolución de conflictos que inevitablemente surgirán. 

Un buen líder debe sacar de su chistera la capacidad de diálogo y la búsqueda de soluciones sin culpables, manteniendo la calma, disimulando la presión y mostrando una total resiliencia. En los momentos de crisis, un líder verdadero no se quiebra; encuentra en cada dificultad una oportunidad para aprender y crecer junto con su equipo. Esta habilidad para enfrentar y superar adversidades con serenidad y determinación es lo que distingue a un líder extraordinario.

Y, por último pero no menos importante, un líder debe actuar en todo momento con integridad, responsabilidad y transparencia. Estos valores no son simplemente cualidades deseables, sino que son la base de la confianza del equipo. Actuar con integridad significa ser honesto y coherente en todas las acciones y decisiones, incluso cuando nadie está mirando. La responsabilidad implica asumir las consecuencias de las decisiones tomadas y la transparencia se traduce en una comunicación abierta y honesta.

Estos principios permiten al líder no solo ganar la confianza de su equipo, sino también Inspirarles y motivarles para alcanzar nuevas alturas y retener el talento.


Noticias relacionadas