CARTAGENA. El Ayuntamiento de Cartagena ha remitido un informe a la Dirección General del Mar Menor, elaborado por técnicos municipales de la concejalía de Litoral, sobre los daños que se vienen registrando en las pasarelas y balnearios instalados en el Mar Menor, para proceder a su correspondiente denuncia por actos vandálicos.
El informe recoge el último episodio registrado en una escalera del balneario que discurre entre Punta Brava y El Carmolí, que ha sido arrancada. También se han registrado daños intencionados en uno de los carteles explicativos, o en la zona de sombraje, que ha sido retirada y guardada por los técnicos municipales para su protección.
Las pasarelas y los balnearios han sido una fuente de discordia desde antes incluso de que se pusieran en el litoral. En su inauguración el catedrático de Ecología de la UMU, Ángel Pérez Ruzafa, advertía que son "estructuras muy positivas para el Mar Menor, porque son capaces de mejorar la calidad de baño y uso, a la vez de hacer un servicio ecosistémico como son las comunidades de filtradores que se colocan debajo de los balnearios como esponjas, cnidarios y que aumentan mucho la biodiversidad del Mar Menor".
Pero, días más tarde, los comentarios salpicaban las páginas de las redes sociales, debido a que estos mismos balnearios se encontraban cubiertos de barro: "Recodémosle que las pasarelas NO solucionan nada. Pues el fango se genera porque se ha cortado la dinámica del mar. El efecto de autolimpieza que generan las corrientes y las olas, NO se sustituyen con pasarelas", dice un usuario tras la inauguración de las mismas, que se produjo el pasado 26 de marzo", dice un usuario; "Sigan, Sigan, Sigan haciendo pasarelas, llegaremos del Mar Menor al Mediterráneo", apostilla otro; "¿Tomar el Sol sobre fango y mierda? Buena solución", añaden en el muro un usuario más. "Jaja se ríen de nosotros como quieren", decían los usuarios en aquellos momentos.
La inversión realizada en la zona es de 1,2 millones de euros, un dinero que para unos es tirado a la basura, para otros una manera de salvar la traumática situación y por último, los que directamente las convierten en el centro de sus iras.