La Región precisa del compromiso de todos

MURCIA. Iniciamos el año 2023 habiendo conocido el pasado 19 de diciembre los datos del crecimiento económico con la publicación por el INE de la Contabilidad Regional de España (CRE) y del Producto Interior Bruto (PIB) por comunidades autónomas correspondiente al año 2021. Se confirma así un crecimiento a nivel nacional del PIB del 5,5% que disminuye al 5% en la Región, lo que conlleva una perdida de 0,5 puntos y ensancha el diferencial con la media nacional, confirmando los datos que se venían anticipando sobre la perdida de fortaleza y, en consecuencia, un menor crecimiento.

Este menor crecimiento conlleva que el diferencial negativo de la Región con la media nacional se ensanche, como podemos constatar al comparar el PIB por habitante de la Región en el año 2020, que se situaba en el 83,4% de la media nacional -16,6 puntos por debajo de esta-, con el PIB por habitante del año 2021, que se sitúa en el 83,28% de la media nacional, lo que conlleva el incremento del diferencial negativo con la media nacional a los 16,72 puntos.

Los datos anticipados de crecimiento del PIB de la Región en los años que siguen, publicados por el BBVA Research el pasado 15 de diciembre de 2022, indican un crecimiento del PIB en 2022 del 4,3%, por debajo de la media nacional del 4,6%. En relación al año 2023 estiman que el crecimiento del PIB regional será del 0,7%, muy por debajo de la media nacional del 1,2%, evidenciando la perdida de fortaleza de la estructura productiva regional, que precisa y con urgencia de un plan que conlleve los medios y las actuaciones precisas para poner en valor todas sus ventajas comparativas.

"Se ensancha el diferencial con la media nacional, confirmando los datos que se venían anticipando sobre la perdida de fortaleza"

Al analizar la estructura productiva de la Región por sectores y actividades y compararla con la media nacional, se puede constatar que el sector de la agricultura pesa en la Región prácticamente el doble que la media nacional. El sector industrial, que incluye la energía y la industria manufacturera, sigue mostrando una fortaleza creciente y su aportación al total nacional ya se sitúa en el 2,99%.

Es el sector de los servicios a la venta donde la Región cuenta con mayores debilidades. En el sector del turismo en la Región se encuentra, cada vez más, alejada de su potencial y precisa medidas urgentes para poder aprovechar todas las ventajas con las que cuenta y acercarse en ratios a las provincias de su entorno. Para ello resulta necesario implementar políticas reales que incentiven la implantación de nuevos hoteles, así como su modernización, con deducciones fiscales en los primeros cinco años, reducción drástica en la burocracia y reducción o exención de las tasas de licencias de obras, tanto en los nuevos hoteles como en la modernización de los existentes.

Implementando políticas que prioricen su realización en función del interés regional y con incrementos máximos que se permitan en los volúmenes de construcción, junto a una campaña conjuntamente con las agencias de viajes y los hoteleros en el exterior para vender todas las ventajas diferenciales con que cuenta la Región y su situación en el Arco Mediterráneo español, para aprovechar las ventajas que conlleva la existencia del aeropuerto y la llegada del AVE por el Corredor Mediterráneo.

Esta debilidad se hace aún más patente en los servicios avanzados en donde la Región continua perdiendo fortaleza. Como se puede constatar en el cuadro, la aportación de la Región al total nacional de actividades fundamentales como información y comunicación aportamos al total del VAB nacional el 1,59% mientras la aportación media nacional es del 3,96% y en las actividades profesionales, científicas y Técnicas, actividades administrativas y servicios auxiliares, la Región aporta al total nacional el 6,68%, muy por debajo de la aportación media nacional del 9,08%.

Fuente: INE y CRE. Los datos de 2020 corresponden al año de la PANDEMIA, * CRE revisión del INE del 19 diciembre de 2022

La Región precisa de un gran pacto regional para aprovechar y poner en valor todas las ventajas con que cuenta, para atraer talento e inversiones exteriores e interiores, reduciendo la burocracia, marcando plazos máximos para las respuestas, implementando el silencio administrativo positivo, reduciendo la presión fiscal y facilitando la implantación emprendedores y empresas. Eso incluye las nuevas tecnologías de la información y la comunicación TIC, de la logística por su estratégica situación en el Mediterráneo, a la vez que conseguir la realización de los equipamientos empresariales y tecnológicos, así como las infraestructuras viarias, y singularmente las ferroviarias en la conexión directa con Madrid y hacia Andalucía.