MURCIA. Las obras del Arco Noroeste de Murcia obligarán a efectuar más expropiaciones de terrenos. Si este verano se conocía el listado de las propiedades afectadas por el tramo C, ahora la Demarcación de Carreteras del Estado ha hecho público las zonas involucradas en el tramo B, que comprende desde el punto kilómetro 4+300 (que es el enlace de la vía regional RM-533) hasta el 14+050 y que abarca tres términos municipales: Alguazas, Archena y Villanueva del Río Segura.
La Demarcación de Carreteras, que depende del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (antes conocido como Fomento) ha anunciado en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM), el pago de los depósitos previos, indemnización por rápida ocupación y levantamiento de actas de ocupación de los bienes y derechos afectados por las obras del mencionado proyecto.
En total, son 71 terrenos afectados. La mayoría, 61, se encuentran en Alguazas, ocupando una superficie de casi 50.000 metros cuadrados, y, de hecho, muchas parcelas son propiedad del Ayuntamiento, si bien también hay dueños privados. El resto se reparten entre siete expedientes de Archena (ubicados en 1.950 metros cuadrados) y otros tres aparecen en 142 metros cuadrados de Villanueva del Río Segura.
La convocatoria, que se hace conforme a la Ley de Expropiación Forzosa de 1954 y su reglamento, cita a los propietarios en tres lugares, en función del municipio: en Alguazas, en la Biblioteca Municipal, durante los días 16, 17 y 18 de diciembre; en Archena, en el Centro Cultural Ramón Centenero durante el 17 de diciembre; y en Villanueva del Río Segura, en la Biblioteca Municipal durante el 18 de diciembre.
Hay que recordar que el Arco Noroeste de Murcia es un proyecto de 21,7 kilómetros de autovía nueva que recibió el 'ok' del Gobierno en 2015 y cuya obra se ha dividido en tres tramos. En este caso, el tramo B suma unos 9,45 kilómetros de longitud.
Tal y como recuerda el Ministerio, el Arco Noroeste posibilitará que se desvíe el tráfico procedente del norte por la A-30 hacia Murcia, a través de su anillo de circunvalación (MU-30) en el enlace de Alcantarilla. Con esta obra, explican, "se derivan los tráficos que proceden del norte de la A-30, tanto de largo recorrido como de incorporación al Noroeste de Murcia. De esta forma, se aligera el elevado tráfico de la A-7 que se da entre los enlaces de Cabezas de Torres con la A-30 y de Espinardo".