CARTAGENA. La presidenta de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT), Francisca Baraza, se ha reunido en el Ayuntamiento de Calasparra con la alcaldesa de este municipio, Teresa García Sánchez, para informarle del proyecto de mejora de todo el Ramal de Calasparra que la MCT va a acometer a partir del próximo mes de abril. Las obras, que suponen una inversión de más de 4,6 millones de euros, se realizarán en tres fases que se prolongarán a lo largo de 18 meses.
Baraza ha destacado que el proyecto de mejora del Ramal de Calasparra aumentará la capacidad global de transporte de esta conducción clave en el abastecimiento a más de 10.000 habitantes de Calasparra y sus pedanías, así como reducirá el riesgo de roturas y garantizará el suministro de agua potable al evitar interrupciones del servicio.
Las obras para renovar el tramo final del Ramal de Calasparra, que discurre por los municipios de Calasparra y Moratalla, comenzarán el próximo mes de abril y cuenta con un presupuesto de 1.897.532,51 euros (IVA no incluido). La ejecución durará doce meses y ha sido adjudicada a Arpo Empresas Constructora.
El proyecto comprende la ejecución de una nueva tubería de fundición dúctil y longitud de 1.926 metros paralela al Ramal de Calasparra. La conducción partirá de una nueva obra de toma directa al Canal del Taibilla y finalizará entroncando con la tubería existente. Además, se instalará un depósito circular de nueva planta con capacidad de 3.000 m³ y altura de agua 3,7 metros. De la salida del depósito partirán dos nuevos ramales: el primero de fundición dúctil se conectará con una arqueta en la que están unificadas las tomas de Pozuelo, Valentín 2 y Bancal de la Sierra; y el segundo ramal se materializa con dos tramos de tubería de fundición dúctil hasta la toma de San Miguel.
Esta primera fase aportará un aumento de la capacidad de global de transporte del Ramal de Calasparra mediante la duplicación parcial de un tramo de la conducción y un incremento de la capacidad de regulación del Ramal mediante un nuevo depósito, alimentado desde el ramal, para servir a las actuales tomas directas de la zona final del ramal. También mejorará la garantía del suministro para las tomas de Bancal de la Sierra y San Miguel. Actualmente dichas tomas están resueltas mediante toma directa, sin regulación de por medio, lo que implica que el servicio sea interrumpido en operaciones de corte del Canal del Taibilla.
Las obras para renovar el tramo inicial del Ramal de Calasparra, que atraviesa el municipio de Moratalla, están en fase de licitación por un presupuesto de 1.259.249,15 euros (IVA no incluido) y con una fase de ejecución prevista de seis meses.
La segunda fase del proyecto comprende la duplicación del ramal en su zona inicial mediante la instalación de una nueva conducción de fundición dúctil de 2.661 metros de longitud. Esta nueva conducción tendrá un nuevo trazado, que se iniciará en el Canal del Taibilla, en una zona situada aguas arriba de la toma actual, y terminará entroncando en la tubería actual de fundición dúctil. Además, se realizará una toma directa al Canal del Taibilla y una obra de entronque a la conducción actual. También se ejecutará una arqueta de hormigón para alojar la conexión entre la nueva conducción y la existente.
Todas estas mejoras en infraestructuras permitirán aumentar la capacidad global de transporte del Ramal de Calasparra mediante la duplicación parcial de un tramo de la conducción. Actualmente, en caso de caudales altos el tramo inicial de la conducción no tiene suficiente capacidad y entra aire por las ventosas, aumentando el riesgo de roturas.
La última fase del proyecto de mejora del Ramal de Calasparra afectará al ramal de Valentín, situado en los municipios de Moratalla, Calasparra y Cehegín. La licitación de estas obras se publicará a finales de 2022, por un presupuesto de 1.523.283,63 euros (IVA no incluido), y tendrá una ejecución de cuatro meses.
En concreto, estos trabajos mejorarán el funcionamiento global del ramal de Valentín, que ahora está deteriorado y ha visto disminuida su sección y, por tanto, su capacidad, debido a las incrustaciones de cal. Con la instalación de la nueva conducción, de mayor diámetro y de un material más adecuado para aguas duras, se pretende solventar esta problemática.
La tercera fase comprende la ejecución de una nueva conducción con una longitud de 5.285 metros, con funcionamiento por gravedad y salvando un desnivel de 68 metros aproximadamente entre la toma y el depósito de llegada. También contempla una nueva arqueta de toma y una hinca bajo la carretera de titularidad regional RM-714, ejecutada con camisa de acero, dentro de la cual se ejecutará la tubería proyectada acerrojada. Por último, se instalará una arqueta nueva para la conexión final con el actual depósito de Valentín 1.
