MURCIA. "La verdad es que todavía estoy flipando, no podía imaginar que enseñar las pequeñas cosas que hago en mi casa iba a tener esta repercusión", reconoce Alicia Martínez, una lorquina de 35 años, madre de un bebé y empleada de banca que, animada por sus amigas, el pasado mes de septiembre abrió una cuenta de Instagram -bajo el nombre de @aly_deco_home- para mostrar las reformas y la decoración de su hogar. Siete meses después ya tiene más de 32.000 seguidores, algunos de sus vídeos se han hecho virales y ha sido objeto de un reportaje en la revista 'El Mueble'.
Alicia explica que el edificio en el que vive en Lorca fue uno de los que hubo que reconstruir tras el terremoto de 2011, incorporando áticos como el que ella compró en 2016. Se trata de una vivienda de 140 metros cuadrados (102 metros cuadrados de piso y 40 de terraza), que consta de tres habitaciones, dos baños, cocina, salón, terraza y lavadero en la propia terraza. "Desde que lo compré he ido poco a poco reformándolo a mi gusto y con mucha ilusión. Sin prisas. No me caracterizo por colocar cosas o muebles porque sí, todo lo que he puesto ha sido por que estaba convencida y me gustaba de verdad", asegura.
Así, reformado allí, colocando un detalle allá y haciendo gala de un gran gusto y mucha idea, esta empleada de banca le ha otorgado a su ático un estilo que se podría definir "mas bien nórdico". Y es que Alicia cuenta que "me encantan los colores neutros, el rosa, las fibras y la rafia. Estoy enamorada de los textiles con pompones, borlas, flecos…. Mis paredes son todas blancas, tengo pocos muebles y estos son de madera o de madera combinada con el blanco".
El suelo original es porcelánico, "pero yo tenía claro que quería calidez y aposté por poner encima tarima; me encanta ir descalza por casa", añade Alicia, quien lacó de blanco todas las puertas de la casa, incluidas las de los armarios, así como los rodapiés. "Siento que dan más amplitud a la estancia; me encanta ver cómo se pierde la tarima en el rodapié", señala.
Tan chula y cálida le estaba quedando su vivienda, que sus amigas la animaron a compartir sus ideas de decoración. "Estoy encantada de poder ayudar e inspirar a otras personas con mi propio hogar", asegura esta 'influencer', quien cuenta que recibe multitud de mensajes agradeciendo sus aportaciones. El secreto, añade, se encuentra en los pequeños detalles que hacen especial cualquier rincón de su casa y en ese toque personal que puede transformar un mueble 'normal' en tendencia.
Aunque Alicia está enamorada de toda su casa, tiene sus rincones favoritos, que son el salón y el lavadero. El primero tiene 30 metros cuadrados y desde un principio, tuvo claro que quería "un sofa grande, con los respaldos reclinables para que no le quitase visibilidad a la televisión desde la mesa". Una pared de piedra color crema le da un toque de diseño a la estancia, cuya ultima incorporación ha sido "una baldita donde he colocado una lamina de Frida que me encanta. Las baldas son un acierto para paredes grandes y frías, ideales para colocar alguna plantita y algo de decoración".
Respecto al lavadero de ocho metros, Alicia decidió cerrarlo. "Es la estancia que más quebraderos de cabeza me ha dado, pero sin duda la que más paz me transmite y con la que me siento muy identificada". Allí ha combinado la madera, el blanco y el negro. Tiene una encimera de lado a lado y un lavabo con dos pozas con frente visto, ideal para lavar ropa. "Tengo la caldera disimulada con una puerta, un zapatero al techo que es súper practico y un banco con almacenaje para relajarte mientras termina la lavadora". En el suelo, al invadir un sumidero, ha colocado un sistema de plots para sujetar las losas porcelanicas y regular su altura, dejando que se filtre el agua e impidiendo que se mojen los electrodomésticos. "Despues de muchos años deseando y proyectando un rinconcito, verlo plasmado tal como lo quieres, es una pasada", afirma.
Del dormitorio principal explica que no es una habitación muy grande, "pero tiene un armario empotrado de tres metros, un aseo pequeño y lo que más puedo destacar de ella es la pared del cabecero de mi cama, para la que empleé la misma tarima del propio suelo, subiéndola por toda la pared. ¡Me encanta! Creo que es algo muy poco visto y que hace la estancia muy acogedora". Para ganar espacio, apostó por un canapé amplio con bastante capacidad de almacenaje. "No soy de tener mesitas convencionales, me gusta algo distinto al lado de la cama. Actualmente tengo una escalera con baldas y en el otro lado un banquito pequeño. En vez de una cómoda he puesto un banco a los pies de la cama. En mi habitación no podía faltar el toque que da una planta natural y hay un poto colgando. Me gusta mucho el toque de las plantas en mi hogar".
"Mi vestidor es un armario empotrado de unos tres metros, está justo al entrar a la habitación haciendo un mini pasillo y justo enfrente del armario está el aseo pequeño. Para acceder, quite la puerta que tenía, que al abrirla reducia el espacio, y opté por una corredera sujeta con guías al techo. La cara que da al armario es un espejo, que va genial para vestirte y mirarte, y la cara que da al aseo es un cristal blanco opaco, ideal para que no se empañe si te duchas. Cuando esta puerta está cerrada se oculta el aseo por completo, no parece que esté justo ahí, solo se ve el espejo", continúa contado Alicia.
Respecto a la cocina, esta amante de la decoración precisa que, aunque no es muy grande, es muy práctica, ya que "tiene mucho almacenaje y la barra la usamos muchisimo. Quería una cocina donde predominase la madera y el blanco. Tengo una barra justo en medio que a penas se nota gracias a su pata de cristal, que da más amplitud a la cocina; lo recomiendo cien por cien". Además, decidió panelar una pared con muebles al techo, donde está el frigorífico americano, el horno y el microondas en columna, así como distintos armarios despensa que sirven para almacenar y mantener el orden. "Pasamos mucho tiempo en la cocina, mientras cocinamos nos tomamos algo en la barra y la disfrutamos mucho", asegura.
La habitación del bebé, que Alicia está llenando "de mucha ilusión y amor"; unos baños reformados y llenos de sorpresas -y en los que, como se suele decir, "no falta periquito"-; y una terraza que poco a poco va tomando forma con el estilo de Alicia, conforman este ático en Lorca, cuyo buen gusto se ha convertido en una fuente de inspiración para otros muchos hogares españoles.