MURCIA. La inversión en investigación y desarrollo (el I+D) continúa creciendo en la Región de Murcia tras el empujón que supuso la pasada década. Pero todavía es insuficiente. La Comunidad murciana, pese a su avance, no ha terminado de cerrar la llamada brecha negativa que arrastra. Así lo pone de manifiesto el último informe IDid (Investigación, Desarrollo, Innovación y Digitalización), elaborado por el Círculo de Economía junto con CaixaBank.
El texto refleja que el avance se desenvuelve en un ritmo más moderado que en el resto del país. No obstante, el gasto interno en I+D alcanzó los 387,2 millones de euros durante 2022, el más elevado de la serie histórica, tal y como ha contado este diario. Esta cifra significa a 253 euros por habitante, lo que significa el 62,1% de la media nacional y el 31,9% de la europea. Ese dato, además, equivale al 1,08% del PIB, frente al 1,44% de nuestro país.
El informe, que es el segundo que se publica tras el del pasado año, analiza la situación de la Región de Murcia tras la era post-covid-. En su apartado de conclusiones, destaca que la Región de Murcia protagonizó la década pasada "una de las mayores expansiones de la inversión en I+D de las comunidades, la más elevada incluso si se computa desde antes de la crisis financiera". Eso, subrayan, "le permitió pasar de una de una posición rezagada en 2010 a otra intermedia diez años después, aunque todavía lejos de converger con los estándares nacionales".
El estudio pone de relieve que en los dos últimos años el dinamizador más importante de la inversión ha sido el sector empresarial, que se consolida como el principal agente inversor. Dicho esto, su participación en el total (49,6%) resulta más moderada que en el ámbito nacional (56,4%) y el europeo (66,2%). Además, reseñan que el otro gran inversor, la Enseñanza Superior, representa el 40% del gasto, la cuarta mayor tasa autonómica (que en promedio alcanza el 26%), si bien desde 2020 viene perdiendo participación en su correlativo nacional, tal y como refleja el documento, consultado por Murcia Plaza.
El sector del I+D abarcó en 2022 a 7.162 trabajadores dedicados a actividades de I+D interna, que representan en torno al 1,1% de la fuerza laboral de la Región de Murcia, por debajo de la cifra española (1,3%). ¿Quién es el principal empleador? La Enseñanza Superior, indican, con más de la mitad del personal y con una alta concentración de aquel de carácter investigador, mientras en la empresa privada predominan los perfiles técnicos y administrativos.
El estudio igualmente califica como "discreto" el presupuesto medio por investigador: 83.600 euros, el cuarto más bajo de las comunidades, donde se promedian 119.470 euros, aunque el de las empresas (165.090 euros) triplica el de la Enseñanza Superior (48.420 euros).
En el ámbito de la innovación tampoco sobresalen las empresas de la Región de Murcia con al menos 10 asalariados: el 20,3% de ellas realizaban estas actividades (23,9% en España), aunque con personal y presupuesto muy limitados.
Asimismo, les parece "irregular" el esfuerzo para proteger las invenciones. En 2022 se solicitaron en la Región de Murcia 63 patentes, la cifra más baja del último quinquenio, que reduce la participación en el total nacional hasta un modesto 1,8%, "cuando no se había bajado del 2,2% desde 2018), quizás porque se recurre con más frecuencia a los modelos de utilidad (92, el 3,5% nacional)".
El informe también recoge que el proceso de digitalización de las firmas murcianas de 10 o más asalariados acumula "cierto retraso respecto a otras autonomías". No en vano, en los últimos cuatro años "no se aprecian avances sostenidos en el porcentaje de trabajadores que utilizan ordenadores (en torno al 50%), en las empresas que disponen de página web (27,9%) o en las que tienen presencia en medios sociales (55%)". Así las cosas, "en todos estos indicadores se está por debajo de la media nacional, donde sí avanzan el uso de computadoras y la actividad social".
De hecho, cuando se mide la intensidad de uso de tecnologías más avanzadas, los resultados son "incluso más desalentadores": el diferencial negativo es muy prominente en el uso de servicios en la nube y, sobre todo, de la Inteligencia Artificial. Esta última, apuntan, sólo está disponible en el 6,6% de las empresas murcianas, frente al 9,6% de las españolas, y se utiliza principalmente (40% de los casos) para mejorar los procesos productivos. En menor medida (20%), para tareas de administración, I+D o innovación, contabilidad y logística.
Todo ello hace concluir que "la Región de Murcia acumula un retraso relativo en los ámbitos de la I+D, la innovación y la digitalización". Una sospecha que "se confirma al construir un indicador sintético, denominado IDid, que ofrece una visión de conjunto y permite realizar comparaciones temporales y territoriales". Si el mismo toma un valor 100 para España, se tiene que la Región de Murcia obtiene una puntuación de 72,9 en 2023, que la encuadran en el grupo de las comunidades de nivel medio.
Eso sí, concluyen que en 2022 la desventaja era menor, de unos 14 puntos frente a los 27 actuales, por lo que "sería deseable redoblar aún más los ya notorios esfuerzos en investigación y digitalización, en aras de retomar el ambicionado proceso de convergencia que había caracterizado la década anterior".
Durante la presentación del informe, el presidente del Círculo de Economía, Joaquín Hernández, valoró que el liderazgo del sector empresarial como agente inversor en nuestra región". No obstante, puntualizó que para "mejorar su eficiencia y productividad hay que realizar un mayor esfuerzo en Innovación, Investigación y Digitalización". En su opinión, "no podremos competir con otras regiones, y otros países si nos alejamos de la media española y europea en los principales indicadores”.
Por su parte, el director Región de Murcia de Caixabank, Juan Jesús Lozano, resaltó que este el informe "busca ser un incentivo para el trabajo continuo de los sectores estratégicos”. A su juicio, "resulta especialmente gratificante observar que la enseñanza superior de nuestra región se encuentra entre las más destacadas de España en términos de inversión, situándonos como un referente en este ámbito gracias a la presencia de tres universidades que representan una ventaja competitiva significativa que debemos aprovechar al máximo".
Aun así, abogó por "seguir avanzando en la creación de una cultura favorable a la investigación a la innovación y a la digitalización". Y concluyó: "Hay que hacerla compatible con los retos medioambientales para los que puede ser una aliada imprescindible. También la Inteligencia Artificial, convenientemente regulada desde una visión ética, puede ser una palanca que impulse y haga más eficientes nuestros procesos productivos".