MURCIA. El presidente de la asociación profesional de hosteleros de Lorca, Hostelor, Jesús Abellaneda, ha considerado “desproporcionado” el nuevo confinamiento decretado por el Gobierno regional y ha pedido que se atrase a medianoche el toque de queda impuesto por el Ejecutivo central para evitar la ruina de bares y restaurantes.
Abellaneda ha señalado este jueves que, después de que Lorca haya estado sometida a 35 días de confinamiento en fase 1, las nuevas restricciones aprobadas por la comunidad autónoma "no son justas” para la localidad.
Ha opinado que el confinamiento de todos los municipios “castiga a aquellas ciudades que lo han hecho bien”, en referencia al descenso de casos positivos de coronavirus en Lorca tras el “esfuerzo” de cinco semanas con la movilidad reducida y la actividad de bares y restaurantes limitada.
Abellaneda ha demandado flexibilidad en medidas como la hora de inicio del toque de queda y propone que la comunidad lo atrase hasta media medianoche en aras del “equilibrio sostenible” entre las medidas de seguridad sanitaria y la actividad económica, social y cultural de las ciudades.
“Creo que se debe de mirar al sector de la hostelería como parte de la solución, como un aliado y no como el problema”, ha afirmado Abellaneda, que siente que los bares y restaurantes están siendo “criminalizados”.
Ha opinado además que estas nuevas restricciones alentarán la celebración de fiestas clandestinas en el interior de viviendas, restando así eficacia a la estrategia de control de la pandemia.
Para el presidente de los hosteleros lorquinos, estas medidas son propias de “una guerra” y solo contribuyen a “crear pánico” entre la población.