Imágenes por ordenador del proyecto. Foto: GESALOR.
MURCIA. La ganadería murciana continúa haciendo la guerra al purín. No obstante, el sector sí está encontrando la forma de hacerle la guerra al que ya está considerado como uno de sus mayores quebraderos de cabeza, pues ha encontrado en las plantas de generación de biogás el aliado perfecto para combatir este desperdicio y evitar sus nocivas consecuencias sobre el medio ambiente. Con esta idea en mente, la cooperativa lorquina Gesalor está impulsando la construcción de dos plantas de biometano en la Región de Murcia.
Estas estarán ubicadas en Lorca y Fuente Álamo, las dos localidades con mayor concentración de ganado porcino de la Comunidad, y serán puestas en marcha gracias a la colaboración de Five-E, una compañía madrileña especializada en la sostenibilidad y las energías renovables, que se une a este proyecto como socio capitalista y comercial.
Así, financiará la construcción de estas instalaciones, que se mantendrán como propiedad de Gesalor, a cambio de obtener el biometano que se genere en las instalaciones, aunque también contribuirá a comercializar el biofertilizante que resultará del tratamiento del purín. Cabe resaltar que estos proyectos tienen un coste de entre 35 y 50 millones por planta.
Esta gran inversión viene motivada por el tamaño que tendrán estas instalaciones, pues tendrán capacidad para tratar 2 millones de metros cúbicos de purín, 10 veces por encima del tamaño habitual en las plantas de este tipo en España. Al fin y al cabo, el objetivo principal de la cooperativa lorquina es encontrar una solución estable para que sus ganaderos puedan impulsar la sostenibilidad a través de la economía circular.
Para ello, el purín será recolectado en las granjas de sus miembros -aunque la planta no estará cerrada a ganaderos ajenos a la cooperativa- y transportado hasta el centro para su tratamiento, del que resultará el biometano, así como un biofertilizante y, de acuerdo con las pruebas realizadas por Gesalor, agua para riego.
En concreto, con 2 millones de metros cúbicos (hm3) de purín tratado al año, se pueden obtener 20 millones de hm3 de gas, otros 65.000 m3 de fertilizantes y 1,5 millones de metros cúbicos de agua, es decir, 1,5 hectómetros cúbicos.
De ambos proyectos, el de Lorca es el que se encuentra en un estado más avanzado, pues se espera que en breve el Ayuntamiento adjudique los terrenos, de forma que la construcción podría iniciarse en unos dos meses. Tras ello, se necesitarían unos 8 meses para completar la balsa para el depósito del purín y la maquinaria para el tratamiento del biofertilizante, a lo que habría que sumar otros 4 o 5 meses más para completar los trabajos requeridos para el biometano, con lo que todo debería estar listo para comienzos del 2025.
Por su parte, la planta de Fuente Álamo es de propiedad privada, por lo que aún se está gestionando el contrato de alquiler con opción a compra. En consecuencia, aún se espera que pasen otros 6 u 8 meses antes de que puedan iniciar los trabajos en este municipio.
Este proyecto se suma a otros similares que se están impulsando en la Región en los últimos años, como el de la ciezana Aura Green en Lorca sobre unos terrenos de 87.400 metros cuadrados.
