Fin a la prohibición de las reuniones en la Región: vía libre a encuentros de dos no convivientes

MURCIA. Un mes y tres días después de entrar en vigor la prohibición de las reuniones familiares, sociales y lúdicas de carácter informal y no reglado en la Región, a partir de este miércoles ya se podrán juntar dos personas no convivientes. Y es que tras la caída de la incidencia de contagios, el Comité Covid de este lunes ha acordado ampliar el número de personas permitidas en las reuniones y encuentros, tanto en espacios privados como públicos, ya sean abiertos o cerrados. Así lo comunicaban el consejero de Salud, Juan José Pedreño, y el portavoz técnico del Comité de Seguimiento Covid-19, Jaime Pérez.

La Consejería de Salud ha autorizado también la reapertura de terrazas y el levantamiento del cierre perimetral en Murcia, Cartagena, Lorca, Molina y otros 15 municipios de la Región, que se suman a la lista de 20 localidades que ya lo tenían permitido. A partir del miércoles, los bares y restaurantes podrán servir, eso sí, solamente al aire libre, con un aforo tope del 75% y con dos clientes no convivientes como máximo por mesa. En cambio, no habrá límite para las mesas de un mismo núcleo familiar.

En una vivienda podrán reunirse dos personas no convivientes como máximo y, en el caso de los 39 municipios se podrán reunir dos no convivientes como máximo o los miembros que formen una unidad familiar.

No es la única novedad: los vecinos de estas 19 localidades podrán cruzar sus fronteras locales, ya que el Gobierno regional ha levantado también el cierre perimetral de esas poblaciones, que se suman a los 20 que ya tienen libertad de circulación y abiertas sus terrazas desde el pasado miércoles. Las nuevas medidas entran en vigor el próximo miércoles, 17 de febrero, con la publicación de la orden en el BORM. El aislamiento de la Comunidad, no obstante, se mantiene y no se podrá viajar a provincias vecinas. Y, además, seis municipios permanecen confinados y sin hostelería, debido a su riesgo de transmisión extrema: Ulea, Beniel, Abarán, Yecla, Cieza y Pliego.

Las poblaciones que abandonan el nivel de riesgo extremo y por tanto pueden reabrir sus terrazas son las cuatro más habitadas de la Región, Murcia y Lorca, con un riesgo muy alto; y Cartagena y Molina, que soportan un nivel medio-alto, según los datos acumulados hasta la fecha.

En nivel muy alto quedan también San Pedro del Pinatar, Santomera, Librilla, Las Torres de Cotillas, Fortuna, Ceutí, Caravaca de la Cruz, Totana, Campos del Río, Mula, Jumilla, Blanca, Águilas, Archena, Alcantarilla y Calasparra.

En riesgo medio alto figuran Ricote, San Javier, Los Alcázares, Alguazas, Torre Pacheco, Bullas, Puerto Lumbreras, Alhama de Murcia, Mazarrón, Abanilla, La Unión, Albudeite, Cehegín, Fuente Álamo, Moratalla, Aledo y Lorquí. Y con transmisión baja aparecen Villanueva del Río Segura y Ojós.

En el ámbito autonómico, la Región seguirá otra semana más en fase 2, dado que la presión hospitalaria sigue por encima de los 500 pacientes (y 130 enfermos críticos en la UCI). La Comunidad contabiliza más de 3.800 casos activos, pero los contagios se han desplomado un 50% en la última semana. Esta mejoría ha permitido que el Ejecutivo murciano haya levantado parte de las restricciones en 39 de los 45 municipios de la Región.