Camiones de ESP Solutions en su sede de Ceutí. MURCIA. Marruecos se está consolidando cada vez más como un mercado al alza. En consecuencia, no es de extrañar que las empresas de la Región lo tengan cada vez más en cuenta a la hora de establecer sus planes estratégicos de crecimiento, como es el caso de la murciana Juver o, más recientemente, de ESP Solutions.
Y es que esta firma de transporte con sede en Ceutí está ultimando los detalles para abrir una oficina en Tánger con la intención tanto de habilitar las exportaciones marroquíes a toda Europa como de facilitar la entrada de mercancías. Esta operación se encuentra en estos momentos bastante avanzada y se espera que la actividad pueda dar comienzo en este mismo año 2023.
"Hay una tendencia ascendente en el mercado marroquí, sobre todo con los cítricos, el pescado y el sector farmacéutico, porque cada vez hay más laboratorios en Marruecos. Esto es lo que nosotros queremos canalizar. Por tanto, vamos a destinar una parte importante de nuestra flota para que opere desde allí", señalan fuentes de la empresa a Murcia Plaza.
En concreto, calculan que entre el 15% y el 25% de sus camiones realizarán rutas que incluyan la sede de Tánger, con el consecuente incremento en la actividad del grupo. Para gestionar esta oficina de transporte terrestre, ya han contratado a varios trabajadores para operar las salidas diarias que pretenden realizar una vez que la actividad dé comienzo.
Tal y como se establecía en su hoja de ruta, ESP Solutions está cumpliendo con su intención de crecer por encima del 20% anual, lo que le permitirá duplicar su volumen de negocio en 5 años. Así, el pasado 2022 alcanzó una facturación de 137 millones de euros, lo que supone elevar en un 26% los 108 millones que obtuvo en el 2021. Por su parte, el beneficio ascendió hasta los 4,2 millones de euros, un 8,8% más.
Para este 2023, la compañía había pronosticado alcanzar una cifra de negocios de 160 millones de euros, aunque el desempeño está siendo positivo y confía en poder superar los 170 millones.
Por otro lado, la firma continúa trabajando en la planta de refrigeración que se está construyendo en Alhama. La compañía calcula que este megacentro de 56.000 metros cuadrados de frío y 120 muelles va a ofrecer a la empresa unas posibilidades impensables hasta ahora en materia de transporte de productos congelados. Tras solventar algunas complicaciones burocráticas, ESP espera que estas nuevas instalaciones puedan estar operativas a finales del próximo 2024.
