MURCIA (EFE).- El Museo Lázaro Galdiano, de Madrid, acoge hasta el 30 de enero una exposición firmada por el fotógrafo Alberto García-Álix y el artista plástico murciano Ángel Haro, dos creadores procedentes de universos creativos diametralmente opuestos, que han alumbrado una serie de piezas con el tema común del tiempo y la sombra.
Así, Tiempo y sombra, comisariada por Begoña Torres, directora del museo, es un proyecto inédito que muestra el diálogo que confronta los universos creativos de ambos artistas, con piezas que combinan distintas disciplinas: escultura, fotografía, pintura o vídeo.
La idea del proyecto nació en 2004, en una conversación entre ambos creadores una noche de invierno en París. Las obras, según Haro, nacen de la necesidad de "volver a pasar tiempo frente a las sombras".
Según la comisaria, con esta propuesta, ambos creadores "son capaces de adentrarse en un terreno que tiene mucho de inexplorado y de búsqueda personal y de tensión dialéctica".
El proyecto es a su juicio, una "correspondencia estimulante" y una apuesta "muy valiente" entre dos creadores.
Entre las piezas que han alumbrado ambos artistas, se encuentra una instalación, esculturas y varios collage que combinan técnicas como la fotografía digital con el dibujo de tinta sobre papel.