MURCIA. El UCAM Murcia Club Baloncesto, como consecuencia de su mala racha en la Liga Endesa con un solo triunfo y ante el colista en las cinco últimas jornadas, aparece ya a dos victorias de los puestos que dan derecho a disputar las eliminatorias por el título y en esa situación recibirá el próximo domingo al Real Madrid.
El equipo entrenado por Sito Alonso, que tras perder por 84-71 en la pista del Real Betis sigue siendo el duodécimo en la tabla ahora con un bagaje de ocho triunfos y 11 derrotas, está con la flecha hacia abajo en el campeonato liguero, lo cual contrasta con la inercia positiva que lleva en la Liga de Campeones FIBA, con cuatro triunfos en sus cinco últimos encuentros en esta competición, que retomará el martes a las seis de la tarde visitando al Darüssaka turco.
El UCAM CB, exceptuando el 72-88 logrado em la cancha de un Carplus Fuenlabrada que acumula 11 derrotas seguidas, no fue capaz de ganarle a ningún rival en el torneo doméstico y, por lo tanto, no atraviesa un buen momento. En esa dinámica tratará de sorprender en siete días al Madrid en un encuentro fijado para las seis y media de la tarde del 12 de febrero en el Palacio de los Deportes de Murcia.
A ese choque los universitarios llegarán estando a dos victorias del Río Breogán de Lugo, que es octavo y, por lo tanto, la referencia para acceder a las eliminatorias por el título.
Por detrás de los lucenses figuran los también gallegos del Monbus Obradoiro, igualmente a dos triunfos de los granas.
Con un bagaje de 9-10 está el Valencia Basket y con 8-11 el Surne Bilbao Basket, además del UCAM CB, por lo que el conjunto de Murcia tendría que remontar cuatro posiciones en las 15 jornadas que le quedan a la fase regular.
Antes le tocará viajar a Estambul, donde en dos días irá a por su segundo triunfo en el top 16 de la Liga de Campeones FIBA dentro de un grupo L en el que es el segundo clasificado con un triunfo y una derrota.
Es lo inmediato y Sito confía en que su equipo ofrezca la mejor versión tras no hacerlo precisamente en Sevilla.
El técnico madrileño acabó "muy descontento" de lo ocurrido en el Palacio de Deportes de San Pablo y no dudó en decir que esa derrota es "un buen toque de atención para todos".
"El Betis estuvo mejor que nosotros en todas las facetas del juego y no entendimos que para ganar fuera hay que hacer un esfuerzo máximo, jugar todo el rato con el cuchillo entre los dientes y tener una energía que no tuvimos", manifestó.