CARTAGENA. Una sola y simple semana de noticias sirve para confirmar que el plan para condenar a Cartagena a ser un parque temático subordinado a Murcia sigue avanzando.
En estos días conocemos el cierre temporal de parte del Hospital del Rosell, que la descontaminación de El Hondón vuelve a complicarse y que los vertidos en Cala Reona continuarán al menos 4 años.
Todo gracias al Gobierno regional, que también se ha encargado de licitar la terminal intermodal de la ZAL de Murcia por 25 millones de euros. Poco importa que desde 2003 sus propios informes recomendaran lanzar la ZAL de Los Camachos en Cartagena, o mucho.
Para eso destinaron a Noelia Arroyo aquí, para que toda esta iniquidad contra los cartageneros no reciba contestación desde el Consistorio, mientras ella pide préstamos para mantener tocando a la orquesta, como en el Titanic.
Casi 30 millones de euros en tres meses ha tenido que pedir para cuadrar las cuentas de una ciudad sucia, en la que no se construye, no se implantan empresas y no hay tren
Casi 30 millones de euros en tres meses ha tenido que pedir para cuadrar las cuentas de una ciudad sucia, en la que no se construye, no se implantan empresas y no hay tren.
Y en la que, además, el Gobierno regional lleva 25 años para tramitar la descontaminación de El Hondón, a pesar de los índices de cáncer en Cartagena, y que tras colapsar el Mar Menor ha puesto todo su poder de devastación en marcha contra Cala Reona, Cabo de Palos y Calblanque.
La noticia positiva que nos venden en esta Cartagena arrollada es que doblan las camas para cuidados paliativos en el Rosell, pocas serán si siguen gobernando.
Que nadie interprete esto como un elogio al PSOE, porque desde que volvió a gobernar en 2018 sólo ha podido invertir en Cartagena un CATE y un CETI, pero no ha traído el tren, ni de pasajeros ni de mercancías. Y así nos va.
Jesús Giménez Gallo
Secretario general de MC Cartagena y portavoz del partido en el Ayuntamiento de Cartagena