MURCIA. Tensión máxima entre PP y Vox. La formación de Santiago Abascal lanzaba este miércoles un ultimátum a los populares: o rompen con las políticas migratorias o no habrá negociación para los Presupuestos. Así lo anunciaba el número dos nacional del partido, Ignacio Garriga, tras conocer la reunión prevista a tres bandas entre Canarias y Ceuta, el Ejecutivo central y el PP para intentar desbloquear la reforma de la Ley de Extranjería y poder derivar a los menores migrantes a otras comunidades de forma obligatoria. "Nosotros no vamos a participar en el reparto de inmigración ilegal y de inseguridad que pretenden Feijóo y Sánchez. Si el PP quiere seguir impulsando las políticas del PSOE, que negocie los Presupuestos con ellos. A Vox no le va a temblar el pulso", avisaba Garriga.
Este ultimátum recae directamente sobre los territorios gobernados por el PP en minoría: Comunidad Valenciana, Baleares, Aragón, Extremadura, Castilla y León y, por supuesto, la Región de Murcia. Su líder regional, José Ángel Antelo, exigía un pronunciamiento "claro" sobre política migratoria "si quieren aprobar" las cuentas y reclamaba como principal condición "la reversión inmediata del reparto de inmigrantes ilegales en la Región" porque esa es, adujo, la medida que causó la ruptura del acuerdo de coalición entre ambas formaciones, que gobernaron juntas hasta julio de este año.
Sin embargo, desde el PP respondían desde Madrid que no iban a someterse a "chantajes de ningún tipo", como así expresaba su presidente, Alberto Núñez Feijóo, quien remarcó que su formación "va a seguir defendiendo sus principios y sus convicciones sin someterse a chantajes de ningún tipo, ni de un lado ni de otro".
Desde la Región, su portavoz parlamentario, Joaquín Segado, dejaba claro que la prioridad es sacar adelante los Presupuestos y advertía de que "decisiones tan importantes no deberían tomarse fuera de la Región", en alusión al anuncio de Garriga. "La aprobación de los Presupuestos debería tener como prioridad el interés general de los ciudadanos de la Región, y no otros", esgrimía tras conocer que Vox suspendía las negociaciones. En cualquier caso, Segado apostilla que, por "la voluntad de primar el interés general", mantienen su "mano tendida y total disposición a hablar y negociar".
Eso sí, en cuanto a la inmigración, Segado se limitó a expresar su rechazo "de plano a las políticas de inmigración de Sánchez", convencido de que "su inacción y su falta de capacidad han creado un problema en España cuya solución quiere descargar en las Comunidades". Y añadía: "Somos conscientes de que esa nefasta gestión ha llevado a crear un problema enorme en Canarias que se encuentra en una situación insostenible, pero también es cierto que la Región ya no puede acoger a más inmigrantes", indicaba.
El portavoz del PP advierte también que Cartagena acoge el mayor campamento de inmigrantes de la península, "muchos de ellos derivados de Canarias". Además, "somos receptores en cuanto a la llegada de pateras", apuntaba. "Hace dos días llegaron en patera 56 inmigrantes, y más de 15.000 inmigrantes han llegado a la Región de Murcia por esta vía desde 2024". Señalaba que la Región de Murcia "está al límite de su capacidad" y pide al Gobierno de España que articule "otra manera o vía de abordar el problema de esta crisis migratoria".
Hay que recordar que la decisión de las comunidades del PP la acogida de 347 niños inmigrantes procedentes de Canarias y Ceuta para hacer frente a la grave crisis migratoria fue el pretexto con el que Vox rompió sus coaliciones de gobierno, entre ellas la Región. Sobre este tema volvía a hacer hincapié Antelo: "El PP incumplió el acuerdo firmado al aceptar el reparto de inmigrantes ilegales. Esto debe revertirse si quieren contar con nuestro apoyo en los presupuestos".
Desde entonces, desde julio, el PP gobierna en solitario y ahora necesita el plácet de alguno de los tres grupos parlamentarios para sacar adelante el Presupuesto. Una abstención bastaría, pues cuenta con 21 diputados y la mayoría absoluta se encuentra en 23 diputados en la Asamblea Regional. El PSOE, que tiene 13 diputados, se ha ofrecido a negociar con los populares, sin muchos avances más allá de la declaración en una sesión de control de Miras, que le indicó a Vélez que se sentaría con él para negociar los Presupuestos.
Con Vox, las relaciones han sido tirantes desde su ruptura. El PP se abstuvo en iniciativas de Vox, como el nombramiento de la comisionada de la Transparencia. pero en otras mociones Vox no ha dudado en unir sus votos a la oposición si así lo ha estimado oportuno, el cambio del calendario legislativo del curso, algo que molestó mucho a los populares, como así evidenciaba Segado al decir: Los principios de Vox duran el tiempo que fueron en coche oficial".
En cualquier caso, Antelo recuerda que además de la inmigración, tiene una lista de peticiones "paralizadas": "El decreto para dotar a los cuerpos de Policía Local de armas largas, pistolas Taser y gas pimienta, el Centro Integral de Rescate y Emergencias de la Región de Murcia (CIRES), y la ampliación del tranvía hasta Molina de Segura. Todo lo han dejado durmiendo en un cajón", lamentaba. E ironizaba: "Más que en suspensión de pagos, están en suspensión de ideas".