Fotos: Iñaky Santiago
MURCIA. El paraíso para vivir está en la Huerta de Murcia. Así de claro lo tenía esta familia, que disponía de un auténtico tesoro: una 'tahullica' en la pedanía murciana de La Albatalía donde soñar con una casa contemporánea, con espacios interiores llenos de luz y que se relacionan con el exterior, autosuficiente energéticamente, con piscina y su propio huerto. Los encargados de dar formas a estos sueños fueron el estudio valenciano Sutterlozano junto con el estudio murciano Afuentes Arquitectura -Ana Belén Fuentes y Ángel Fuentes-, quienes están convencidos de que una de las funciones más importante de la arquitectura es mejorar la vida de las personas y crear espacios con los que sus clientes se sientan identificados.
Recuerdan los arquitectos que "este emplazamiento era para nuestros clientes el paraíso donde construir la casa de diseño de sus sueños, ya que ofrece las ventajas de vivir en un entorno natural a tan sólo 15 minutos en bici del centro urbano". Además, destacan que "la huerta ha sido y es el soporte de la ciudad de Murcia", tanto es así que cuenta incluso con su propia unidad de superficie, la tahúlla, equivalente a 1.118 m2, un poco más de los 1.063 m2 de los que dispone la parcela neta. Por lo tanto, el nombre del proyecto vino solo: 'La Tahullica, casa de diseño en la Huerta'.
A veces, lo que a priori puede parecer una desventaja se convierte en una oportunidad. Así se abordó el hecho de que esta parcela no dispusiera de suministro eléctrico, ya que esto motivó a los clientes a construir su vivienda autosuficiente a nivel eléctrico mediante placas fotovoltaicas. "Ahora, están encantados con su decisión, ya que las facturas de luz son inexistentes", señalan desde AFuentes Arquitectura.
De esta forma, la cubierta -actualmente solárium-mirador sobre la huerta de Murcia en las bandas laterales- acoge en la franja central placas fotovoltaicas que hacen a la vivienda autosuficiente a nivel eléctrico. La climatización en invierno se asegura mediante una caldera de biomasa.
El proyecto ha tenido muy en cuenta medidas pasivas y de arquitectura bioclimática tan necesarias en esta latitud, sobre todo en verano, como la ventilación cruzada, el control del asoleo mediante la disposición de elementos de sombra, la colocación y tamaño de los huecos según la orientación.
Estos profesionales murcianos explican que el gran valor del diseño de su casa para los clientes radicaba en su relación con el exterior. Así, "el jardín se relaciona con el interior mediante un variado y complejo repertorio de espacios intermedios: porches, terrazas cubiertas y descubiertas, aleros, patios y caminos".
Añaden que los tres volúmenes resultantes de la vivienda albergan un programa diferente: "Hacia el Oeste se ubican los espacios más utilitarios (cocina, instalaciones, lavandería) con el dormitorio para la pareja. Hacia el Este se encuentran las habitaciones de las hijas. Ambos -padres e hijas- separados y unidos por una banda intermedia donde se ubican las estancias para la vida familiar: terraza Norte, sala de estar-comedor, terraza Sur y piscina". Además, la estructura fue dimensionada con la intención de poder ampliar en un futuro la vivienda, según las necesidades de la familia.
Otra cuestión que se tuvo en cuenta es que los clientes deseaban disponer de un entorno vegetal y una casa con huerto cultivado por ellos. "En consecuencia el proyecto tuvo en cuenta un tratamiento de la parcela que reducía al mínimo el uso de pavimento artificial y recurría a plantas y árboles autóctonos del entorno de huerta. Se diseñó un ajardinamiento sencillo que permitiera su desarrollo en el tiempo por parte de los inquilinos", concluyen los arquitectos.
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