MURCIA. Nuevo impulso a la limpieza en el Mar Menor. Y es que el contrato para la retirada de biomasa vegetal, que supone una inversión de casi 13,2 millones de euros, acaba de ser adjudicado. En concreto, Entorno Urbano y Medio Ambiente, una compañía perteneciente al grupo murciano Hozono Global, y Transportes Europeos del Campo de Cartagena (Trescarsa), quienes se encarguen de estas labores durante los próximos dos años.
Esta licitación queda de esta forma 'en casa', pues las dos empresas de la Región han accedido a ella después de superar a sus cinco competidores. Para ello, han resultado claves la memoria de los trabajos y la mejoras en los servicios a prestar, que suponían el 40% y el 30% de la nota final.
No en vano, esta ha sido la segunda oferta económica más elevada, un valor que representaba los 30 puntos restantes del concurso y que suele ser clave a la hora de decidir de qué lado cae la moneda.
En concreto, este contrato ha sido diseñado con el objetivo de actuar de forma constante en todo el borde litoral y la lámina de agua del Mar Menor, eliminando las acumulaciones de materia orgánica en descomposición en las orillas y aguas someras, que influyen negativamente en la calidad ecológica y paisajística del entorno. De esta forma, se mejora además el uso público de la laguna así como la calidad de las aguas de baño y se disminuye la generación de fangos y lodos derivados de la descomposición de la biomasa vegetal.
Al fin y al cabo, este mayor aporte de biomasa se produce por la masiva proliferación de algas consecuencia de las entradas de nitratos y otros nutrientes que llegan al Mar Menor, y su presencia genera una cantidad aún mayor de nutrientes, lo que se conoce como eutrofización. Además, también supone un alivio para los vecinos de la zona, pues la putrefacción de estas algas en la orilla produce fuertes olores y unas condiciones higiénicas no deseadas.
La mejora del estado ecológico del Mar Menor reduce el volumen de biomasa recogida en los últimos años. Así en lo que llevamos de año se han retirado 5.048 toneladas de biomasa frente a las 8.000 toneladas del año pasado o las 27.400 toneladas del año anterior. En total, desde que se implementaron las brigadas de retirada de biomasa en 2022, se han extraído del Mar Menor un total de 40.413 toneladas de biomasa.
Esta inversión se suma los 27,87 millones de euros ya destinados a este proyecto por el Gobierno regional y eleva el coste total a 41 millones de euros en labores de retirada de biomasa desde que se puso en marcha esta medida en 2017.
El consejero del ramo, Juan María Vázquez, defendió la “eficacia” de esta medida en el Mar Menor, un ecosistema “extremadamente frágil, que consiste en la eliminación de esta materia orgánica antes de su descomposición y resulta fundamental, ya que evita que los nutrientes retornen al ecosistema, minimizando así el riesgo de eutrofización y la proliferación de algas.
"Eliminar la materia orgánica antes de que se descomponga es clave para proteger el Mar Menor. Al evitar la acumulación de fangos y la liberación de nutrientes que estas plantas acumulan, reducimos la cantidad de nutrientes que se encuentran disponibles para el crecimiento de nueva biomasa y, en última instancia, logramos mantener un equilibrio más saludable en el ecosistema lagunar", señaló Vázquez.