TRIBUNA LIBRE / OPINIÓN

El derecho a la vuelta al cole

17/09/2020 - 

Este lunes día 14 empezó el cole. Por primera vez vi en mis hijos una sonrisa de emoción que hacía ya siete meses había desaparecido… y me contagié de ellos. Sonreí con ilusión, tanto fue así que a las cinco de la mañana estaba en pie como una niña.

Pero no fue solo mi familia la que vivió esto en España, yo diría que fueron ocho millones de familias en España, y en la Región al menos 300.000.

Otros muchos lo vieron desde el otro lado del vaso, muy preocupados por lo que nuestros colegas europeos debían decidir tras semanas con colegios abiertos, y cierres por contagios.

Pero ya sabéis que yo soy de la visión del vaso medio lleno, es decir, qué ilusión volver a volver al cole. Cómo necesitan los menores el derecho a la educación, a relacionarse, a compartir con sus amigos. Aunque este año no será el año de compartir los lápices, sino de obedecer los protocolos covid…

Pensaba que si el Ministerio no sabía qué hacer y por eso deja a algunos de nuestros hijos en función del grado educativo y la edad, a los niños en casa, por ejemplo los menores de 6 años no están obligados (quizá porque ni tan siquiera se garantiza la escolaridad de forma pública y segura ni gratuita, y entonces se libera de esta responsabilidad y obligación) a los mayores de seis hasta los 12 les quita un día de cole. ¡Ay, quien lo hubiera pillado con siete años!, ¿O no soñaste esto alguna vez?, pero ahora ellos se quedan con 7 años solos en casa, ¿qué habrían dicho nuestros padres? Hoy nuestros abuelos infectados por el miedo. Y a los de la secundaria les dicen que online y dos días a casa, aumentando la factura hasta en 400 euros y qué hacemos los padres, madres, tutores y familias que no llegamos, pues el debate el claro, la educación nunca fue clave en España porque la clave siempre fue la pandereta. A los universitarios ni les hemos prestado atención. ¿Qué pasará cuando al ingeniero aeronáutico se le exija en 20 años no equivocarse en un cálculo de computación?, seguramente dirá, ese año estuve con la covid.

¡Vaya! Y me viene a la cabeza tantas noches de entrega y tantas madres, que esos años en sus currículum aparecen vacíos porque cuidaron del mundo de sus hijos. Hoy nos toca salir a decir, debemos garantizar a nuestros hijos (el futuro social) la educación, la ilusión por volver a volver al cole, sin que el miedo les coma. NO

Aquí mi grito, pero ahora toca trabajar y reivindicar, tampoco quiero que sea a costa del teletrabajo para conciliar, ni la renuncia de nóminas, ni a niños solos en hogares porque no se pueden plantear quedarse, porque han de comer, y lo peor que dejen de estudiar porque no se pueda, la terrible brecha digital. Muy bien la medida que se adoptó sobre ayudas a conciliar, por fin alguien tomó nota de un wasap. Un poquito de cerebro por favor, que solo con esto no llegamos.

¿Qué población activa tenemos en España? Resulta que coincide con la población en edad de crianza, y les estamos diciendo que al paro, y que nada de futuro, ni de derechos ni de aliento. Perdonadme, pero estoy cansada de este rebaño sin pastor, de tanta oveja Doly, todas iguales. Salgamos ya del rebaño, por fin podemos ser ovejas negras, ¡venga!

Acaso no hemos visto a diputados con bebés por en medio en entrevistas, a hijos de compañeros de trabajo, a teletrabajos que son más Superman, porque estás conectado en clase de tu hijo y en la reunión del cliente, o el Consejo, o la conferencia de las 11 horas, y ¿dónde queda la flexibilidad y el derecho a la intimidad, y la vulneración de la explotación, y dónde el derecho a que mis hijos vivan con una sonrisa de ilusión ver a sus compañeros de colegio sin mascarilla?

Algunos hablan de dos años de mascarillas, de crisis, de bancos y fusiones, y yo lo único que veo son dos años de posibilidades, de seguir brindándole a mis hijos la oportunidad de crecerse ante el riesgo y temida covid. Hoy usaré una expresión robada, ‘corrazón’, apliquemos la razón al corazón, para hacer posible el derecho a la vuelta al cole. Para decirle al futuro social que si se quiere se puede, y que los malos no vencerán.

¿Qué dices tú?

Macarena Perona es consultora estratégica

@perguimaky

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