MURCIA. La Consejería de Educaciónha puesto en marcha el programa educativo Aire Limpio, gracias al cual los centros públicos de Educación Infantil y Primaria y de Educación Secundaria que deseen participar podrán trabajar en colaboración con profesionales sanitarios para poner en marcha una serie de medidas que contribuyan a desarrollar un entorno más seguro y saludable en la escuela.
La Consejería destina 500.000 euros a este nuevo programa, de los que 300.000 euros serán para gastos de funcionamiento y 200.000 euros para gastos inventariables, para promover la creación de entornos escolares más seguros y saludables. El objetivo es mejorar la calidad del aire interior y exterior y enfocar la realización de las actividades hacia la naturaleza y el aire libre, algo que propiciará minimizar el riesgo de transmisión de la covid-19.
Los centros podrán invertir esta dotación, que será de 12.500 euros por centro, en plantar árboles, aumentar las zonas de sombra en los patios, reacondicionar espacios exteriores en los que el alumnado pueda expresar su creatividad y que permitan realizar actividades educativas al aire libre como parte de su rutina diaria. También podrán adquirir, según sus necesidades, medidores de CO2, medidores de calidad del aire o material fungible para el aula y las zonas exteriores.
La consejera, Esperanza Moreno, presentó este miércoles el programa educativo en el patio del centro Carolina Codorniú de Churra (Murcia), acompañada por el responsable de la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica del hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, Juan Antonio Ortega, con quien, a través de la dirección general de Innovación Educativa y Atención a la Diversidad, se está colaborando para desarrollar el programa Aire Limpio.
Moreno destacó que se trata de una iniciativa “para asegurar que nuestros centros sean los lugares más seguros posibles y para ayudar a toda la comunidad educativa a adoptar medidas higiénico-sanitarias más eficaces contra la transmisión de la covid-19”.
También se pondrá en marcha una Red Colaborativa de Salud Medioambiental Escolar y un banco de recursos, en la que profesores y alumnos podrán intercambiar buenas prácticas y desarrollar sus competencias en salud medioambiental. El alumnado de los centros tendrá un papel predominante en este programa a través de la figura del alumno encargado de salud medioambiental en el aula.
“Aire Limpio apuesta por la participación activa de toda la comunidad educativa, en el que las familias, las Ampas y los ayuntamientos están invitados a participar”, señaló la consejera, quien destacó que este programa también promueve el uso de la movilidad activa como, por ejemplo, ir caminando o en bici al centro educativo y la peatonalización de los entornos escolares durante las entradas y salidas del alumnado, “lo que es clave para reducir los contagios, según los expertos sanitarios”, añadió.
Además de las acciones que los centros seleccionados (unos 40) lleven a cabo en el marco de este programa, la Consejería de Educación también realizará actuaciones como el cambio de ventanas, sustituciones de instalaciones eléctricas o habilitación de nuevos espacios, por un valor aproximado de 2,5 millones de euros.
