MURCIA. Nuevo impulso al agua desalada en la Región. No obstante, en este caso no se trata de la inversión en ampliar la capacidad de producción, sino que la clave está en mejorar el almacenamiento y distribución del agua para que pueda aprovecharse mejor, para lo que se han invertido más de 10 millones de euros en la construcción de un depósito en Valdelentisco.
Para ello, la Secretaría de Estado ha confiado en Eneas Servicios Integrales y Acsa Obras e Infraestructuras para llevar a cabo estos trabajos, que realizarán en forma de Unión Temporal de Empresas (UTE). Estas compañías se han alzado vencedoras en un contrato altamente disputado, pues hasta 23 candidatas habían presentado su oferta en la licitación.
Sin embargo, lo cierto es que estas dos empresas no fueron las que obtuvieron una mejor puntuación técnica, que correspondía al 50% de la nota, pues la sevillana Arpo logró aventajarlas en este campo. Por tanto, tuvieron que alcanzar una posición casi perfecta en el apartado técnico, que también abarcaba el precio, para conseguir una nota total de 84 puntos sobre 100.
La actuación consistirá en un nuevo depósito de regulación de 65.000 m3, además de otras instalaciones auxiliares que complementarán el servicio, como un aliviadero, casetas de entrada y salida o instalaciones de recloración, entre otras. Por estos trabajos la UTE recibirá 10,6 millones de euros, pero dado que el Estado no se abona el IVA a sí mismo la cantidad final quedará establecida en los 8,8 millones de euros netos.
En concreto, fue el Ministerio de Medio Ambiente (Miteco) quien impulsó esta actuación con el objetivo de que la Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT) pueda hacer un mejor uso de los 13 hm3 de agua desalada que se ha comprometido a adquirir cada año. Al fin y al cabo, esta cantidad se vierte al antiguo Canal de Cartagena para alcanzar el paraje del Lirio, desde donde se distribuye para su consumo entre varias poblaciones.
Sin embargo, como la llegada a este punto es en continuo y el agua debe ser distribuida con variaciones, resultaba necesaria la construcción de un depósito que regule el funcionamiento. No en vano, en esta zona la demanda varía mucho entre el invierno y el verano, de forma que conviene tener agua almacenada para poder recurrir a ella en los meses estivales y mejorar el sistema, pues la garantía de suministro es de pocas horas en estos momentos.
Estos 13 hm³ suponen el abastecimiento de unos 150.000 habitantes equivalentes, pero sobre todo la garantía del abastecimiento estival de una población estacional cercana a los 300.000 habitantes. "En dicha situación es imprescindible un depósito adicional al existente que pueda regular el aporte de la desaladora de Valdelentisco y puedan explotarse las instalaciones con cierta garantía", indican desde el Gobierno.