MURCIA (EP). La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red (Consumur), en el marco de la campaña de información y sensibilización sobre el consumo responsable en Navidad, ofrece una serie de recomendaciones a tener en cuenta a la hora de adquirir los regalos de Navidad y Reyes como, por ejemplo, comparar los precios de los juguetes en varios establecimientos y no dejarse influenciar por la publicidad.
Una parte muy importante del consumo durante las fiestas navideñas lo constituye, precisamente, la compra de juguetes. Por ello, para ayudar a los padres en la elección de los regalos para los más pequeños y evitar así los problemas que una mala elección puede suponer, Consumur ha elaborado un decálogo de consejos a tener en cuenta a la hora de comprar juguetes, han informado desde la asociación.
En primer lugar, recuerda que los juguetes, además de ser divertidos, pueden utilizarse como instrumentos para la educación infantil, por lo que es preferible elegir juguetes educativos y formativos.
Asimismo, destaca que no hay que dejarse influenciar por las campañas publicitarias y aboga por comprar juguetes sencillos, ya que, normalmente, cuanto más complicados, más aburren al niño, sus precios son más elevados y más fácilmente pueden estropearse.
Además, los juguetes sexistas y los que fomentan conductas agresivas deben rechazarse, ya que no son nada educativos y pueden ser negativos para el desarrollo intelectual del niño.
Otro aspecto a tener en cuenta en la elección de juguetes es la edad del destinatario. En torno a los cuatro o cinco años resultan convenientes los juegos de manualidades que ejerciten la habilidad del niño, así como el juego en grupo; mientras que cuando los niños son mayores, son recomendables juegos deportivos o electrónicos.
"Las advertencias del etiquetado deben tenerse muy en cuenta, sobre todo aquéllas que se refieren a la edad, ya que un juguete diseñado para un niño mayor puede perjudicar seriamente a uno más pequeño", advierte Consumur.
A esto hay que añadir que hay que asegurarse de que el juguete carezca de filos cortantes y si se compran juguetes desmontables es importante comprobar que todas las piezas sean lo suficientemente grandes para impedir que los niños las ingieran.
Es especialmente importante que el juguete ha de incorporar el anagrama CE, indicativo de que cumple las normas de seguridad. Este anagrama debe aparecer de forma visible en el juguete, sobre el embalaje, en un folleto adjunto o en una etiqueta.
Junto a ella deben figurar otras advertencias según el grado de peligro que presente el producto.
Hay que tener cuidado con las grandes ofertas de juguetes de algunos establecimientos, ya que en ocasiones ofertan juguetes 'gancho', más baratos que en otros comercios, siendo el resto más caros. Por ello, lo mejor es no comprar todos los juguetes en el mismo establecimiento, sino comparar los precios de cada uno en distintos comercios.
Antes de realizar la compra es importante comprobar el contenido del embalaje y el funcionamiento del juguete, para asegurar que éste esté en perfecto estado.
Por último, Consumur recuerda que los juguetes tienen una garantía de tres años, al margen de otras que pueda ofrecer el fabricante o el establecimiento, que deben constar por escrito.
Por ello, si existen deficiencias el consumidor puede exigir durante el plazo establecido su reparación, sustitución o, en última instancia, el reembolso de la cantidad pagada.
Los cambios por causas distintas a la existencia de defectos de origen sólo podrán exigirse si el comercio admite expresamente en su publicidad esa posibilidad. En caso contrario tal sustitución sólo dependerá de la buena fe del comerciante.