CARTAGENA. El Gobierno regional continúa con las labores de retirada de biomasa con 90 efectivos en playas, a los que se suman 30 pescadores con 25 embarcaciones para realizar las tareas dentro del agua. Según han informado fuentes de la Comunidad, actualmente se están retirando cerca de 90 toneladas de algas al día.
Durante este viernes 20 de mayo, el personal del IMIDA ha continuado realizando mediciones de oxígeno en el área de La Ribera. De los 28 puntos de medición llevados a cabo, en dos de ellos se han detectado valores ligeramente inferiores a 2 mg/litro. En concreto en la zona cercana a la Escuela de Vela Socaire. En los otros puntos medidos se registra una media de oxígeno en el fondo de 4,44 mg/l. La nota positiva es que no se ha observado ninguna anomalía en la fauna ni se ha tenido que retirar ningún pez en la zona. Desde los últimos días de abril se viene retirando la llamada ‘sopa verde’. La Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar viene realizando tareas de limpieza en distintos puntos del Mar Menor desde entonces y está previsto que sigan realizando estos trabajos hasta el 30 de mayo.
Pese al cierto respiro de este viernes, la situación de la laguna sigue siendo muy preocupante si se revisan los últimos datos. A 6 de mayo, uno de los más valores más preocupantes es el de la turbidez. Por estas mismas fechas, en 2021 registraba 0,572 FTU (Unidad de Turbidez de Formazina) mientras que este año el nivel se dispara a los 2.046 FTU. Este parámetro refleja la cantidad de materiales suspendidos en el agua, tanto de origen biótico como abiótico. Los sedimentos suspendidos, partículas de suelo (arcillas, fangos, arenas, etc.) que entran en el agua y organismos suspendidos aumentan el valor de este parámetro. Se mide mediante la dispersión de la luz y se expresa en unidades NTU (Unidad Nefelométrica de Turbidez), también puede expresarse con respecto a la turbidez que producen determinadas sustancias disueltas en agua o partículas suspendidas como la Formazina, expresándose entonces como FTU (Unidad de Turbidez de Formazina).
El nivel de clorofila también experimenta variaciones preocupantes. Las retiradas de biomasa que se vienen produciendo desde hace varias semanas ya hacían presagiar un aumento en este parámetro. Si en 2021 el nivel era de 0,628 mg/m3 por estas mismas fechas, en 2022 esta cifra ha mutado hasta los 1.064. La clorofila es la molécula que utilizan los vegetales unicelulares suspendidos en el agua (fitoplancton) para realizar el proceso de conversión de la materia inorgánica en biomasa a través de la luz solar como fuente de energía (fotosíntesis). La concentración de clorofila en el agua - que proporciona el color verde del agua - se utiliza como una estima de la biomasa del fitoplancton.