MURCIA. La empresa molinense Secom Iluminación, una de las referentes del sector de la iluminación térmica en España, se encamina hacia su desaparición. La compañía, cuyo principal accionista es el fondo madrileño de inversión Realza Capital, ha ejecutado un ERE que ha afectado a 60 de sus 74 trabajadores, según ha podido confirmar Murcia Plaza. Este diario también ha podido saber que el grupo ha iniciado los trámites para solicitar al juzgado el inicio de un concurso de acreedores que desembocará en la liquidación de la compañía con sede en el polígono industrial de La Estrella, en Molina de Segura.
Los trabajadores recibieron la notificación del cierre de la empresa el pasado 1 de febrero y el anuncio de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). El 9 de febrero comenzó el periodo de negociación entre la empresa y los empleados, con sus respectivas reuniones marcadas por la ley, y el 15 de marzo se aprobó el ERE. Los 60 empleados afectados por el despido ya han recibido la indemnización y el finiquito, según indican varias fuentes a este periódico.
La actividad de Secom se encuentra bajo mínimos hoy día. Los 14 empleados que permanecen en plantilla continúan trabajando a la espera de que el juzgado apruebe el inicio del concurso y asigne un administrador concursal.
Fundada en 1989 por José María Sandoval, Secom creció muy rápido y en 1994 se constituyó como SL. Con el tiempo se convirtió en uno de los referentes de la industria de iluminación en España y sus productos de luminarias de tecnología LED y proyectos de luz de última tecnología alcanzaron los cinco continentes. Llegó incluso a iluminar con 28.000 led la primera rotonda submarina del mundo en las Islas Feroe.
En 2018 el fondo de capital privado Realza Capital se hizo con el 67% de la acciones mientras que Sandoval, a través de la sociedad Ducto Inversiones, se quedó con una parte minoritaria. Aquella operación se concibió como un salto cualitativo de la empresa, que impulsó los planes de expansión internacional.
La facturación, sin embargo, había descendido en los últimos años, al pasar de los 22,1 millones de euros facturados en 2017 a los 17,6 millones de euros registrados al término del 2022. Las cuentas reflejaban ya pérdidas en 2021, con un saldo negativo de 1,20 millones, que ascendió a 1,742 millones en 2022, siempre según los resultados publicados en el registro mercantil.
Fuentes conocedoras de la operación señalan que las deudas han sido uno de los detonantes del adiós. La firma debía 11,7 millones en 2022, aunque la cifra se había rebajado en los últimos meses hasta unos 8 millones, aproximadamente. La empresa también había sufrido una pérdida de talentos. Secom sumaba 103 trabajadores en 2021. En 2022 el personal fijo bajó hasta 93 y en 2024 la plantilla ya era de 74.
Esta redacción ha intentado en varias ocasiones contactar con la empresa sin éxito.