De aquí a la eternidad

Presupuestos eternos. Valga el previo y la licencia cinematográficos para constatar que el ex ministro de Economía, Cristóbal Montoro se ha asentado en la historia. Está ya en la eternidad. Digamos que sus famosos Presupuestos Generales del Estado van camino de convertirse en las cuentas más longevas de nuestro país. La geometría variable de Pedro Sánchez no encuentra la cuadratura del círculo. Los vaivenes con Pablo Iglesias forzando la máquina con los socios de la moción de censura,-independentistas como ERC y Bildu-, o las querencias estratégicas con Ciudadanos desconciertan a unos y otros. En Europa nos han dado un toque de atención. El Gobierno español no ha presentado una nueva senda de déficit, tampoco el techo de gasto. O sea que los previos para elaborar los PGE no existen. Así que el “eterno” Montoro seguirá permaneciendo en el tiempo con sus presupuestos que se estiran como el chicle. Los tiempos que marca la dinámica parlamentaria no permiten recortar los plazos para una tramitación exprés. Así que podríamos estar ante una nueva prórroga presupuestaria de las cuentas de Montoro que se elaboraron en 2018 y pueden llegar al 2021. Lo dicho “De aquí a la eternidad”.

Un ruego para sus señorías parlamentarias: ¿Hasta cuando la sesión de control al Gobierno? Titulares para los medios y de forment, ni un gra. Uno pregunta, el otro no responde y erre que erre el de más allá vuelve a preguntar con sus admoniciones y el inquirido ataca al otro con sus inmundicias corruptas.  La question time británica no era esto. Al final cada miércoles la misma cantinela y un día tras otro parecen intercambiables. Podrían ponerlas en bucle sin solución de continuidad. No aportan nada, más allá de que a alguno se le escape intencionadamente un pésame inoportuno y doloroso o que alguien tenga una brillante frase. Es decir, papel mojado.

El Tablero 

• PSOE: Desconcertante Pedro Sánchez. En su propio partido se preguntan en qué hora y momento están. No entienden los bandazos presupuestarios. Ahora con ERC y Bildu, antes con Ciudadanos ¿Por qué deja hacer a Pablo Iglesias? Gabriel Rufián, el portavoz de ERC no daba crédito. Dos reuniones, dos, con dos vicepresidentes, dos, cada uno y por su orden. Carmen Calvo e Iglesias recibiendo al simpar catalán. Muchos se barruntan que al final Sánches engañará a todos. Lo ha hecho ya en anteriores ocasiones. Y en muchas ha tenido baraka y le han salido las cuentas. La semana pasada le fallaron los cálculos parlamentarios a cuenta de los remanentes de los ayuntamientoss. Así que la ministra de Hacienda, Mª Jesús Montero ha autorizado a los alcaldes a gastar su superávit. O sea rectificación en toda regla.  De tanto ir el cántaro a la fuente se puede romper. Si se llega a la nueva prórroga-Montoro ¿habrá nueva convocatoria electoral o en un esfuerzo milagroso de última hora con ingenio para pactar las cuentas del Estado con quién sea y como sea?
• PP: El pánico de Pablo Casado. En la sede de Génova no saben cómo reaccionar Si hay imputación por la Operación Kitchen de Mariano Rajoy y su cúpula,-Cospedal, Fernández Diaz-, el PP se verá abocado a expulsarlos del partido. Y es que el desconcierto crece por momento porque Rajoy no se manifiesta. Y máxime cuando en el Congreso habrá una mediática comisión de investigación,-con el inopinado apoyo de Ciudadanos-,  que aunque no sustancie nada delictivo hará mucho ruido. Tendrán que desfilar desde Rajoy a Cospedal, el propio Casado y demás compañeros mártires populares. Muchos se preguntan como la entonces responsable del CNI, a la sazón vicepresidenta del Gobierno entonces, Soraya Sáenz de Santamaría no aparece en este lio que diría Rajoy. Aquello del duelo con Cospedal. Mientras el  despechado Francisco Martínez asegura “voy a contarle al juez todo lo que se”. Así que daño a la marca reputacional del PP y así es difícil remontar. Además pronto habrá decisión del Supremo sobre Gürtel, también sentencia de las pantallas de la visita del Papa y un sinfín de causas. Así que lo de las soluciones creativas/matar al padre pueden no ser suficientes.
• Vox: Santiago Abascal de la moción instrumental a la moción propaganda. De tanto usarla se va a romper que cantaba Rocío Jurado. El uso propagandístico de amagar y no dar, anunciar y no presentar, no les va a rentar. Entre tanto malabarismo por copar titulares de unos y otros se van a perder en el maremágnum. También han tirado en el Parlamento de manual confuso. Iván Espinosa de los Monteros, portavoz parlamentario de la formación  ha querido enfrentar a Sánchez con sus contradicciones: ley de Memoria Democrática, los mayores que mueren solos en casa, el turismo se derrumba, la covid avanza,…más parecen los clásicos odiadores/haters de estos tiempos.
• Unidas Podemos: Pablo Iglesias y la doble personalidad. En un a modo de Doctor Jekill y Mister Hyde el vicepresidente juega nerviosamente. Se sabe protegido en el ejecutivo hasta que Sánchez diga y actúa compulsivamente. Si Carmen Calvo se reúne con Rufián, el también, si el ministro Fernando Grande-Marlaska dice que el fenómeno de la “okupación” es preocupante y hay que tomar medidas, el lo desmerece y asegura que no existe tal problema,…en fin que sus cuitas judiciales no le dejan ver más allá aunque aparente tranquilidad escénica con sus actuaciones en el púlpito parlamentario. No estamos es tiempos de hacer gracias en el cuerpo a cuerpo. La sobreactuación tapa algunas carencias y debilidades. 
• Ciudadanos: Inés Arrimadas se siente utilizada. Se sentía útil Arrimadas para rentabilizar sus diez escaños, pero ahora se ve sorprendida por la dinámica de acuerdos presupuestarios con los independentistas que ha propiciado el Gobierno de Sánchez. El presidente le recuerda constantemente la foto de Colón que ella quiere orillar. Desde Moncloa se ha intentado la provocación con una imposible moción de censura en la Comunidad de Madrid que les pondría al frente del ejecutivo madrileño. Mantener el equilibrio de gobernar en Madrid y pactar presupuestos con el PSOE es complicado si además te sientes puenteado. A veces de querer abarcar tanto te puedes quedar sin nada. El intento ha sido positivo porque ha movido el tablero pero al final las cuentas imposibles, siguen siendo imposibles.

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Las frases de la semana

Pablo Casado, presidente del PP: “No voy a pasar ni una, pero no admito juicios paralelos ni dobles varas de medir” ¡Toca invierno difícil con la marca dañada nuevamente por la corrupción. Habrá que aplicar cirugía!

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno: “Ustedes han tapado la Gürtel con la Kitchen” ¡La sobreactuación para tapar tus carencias!

Juan Carlos Campo, ministro de Justicia: “La justicia no está politizada en lo más mínimo” ¡A más de uno le entra la risa nerviosa. Pensemos en las últimas instrucciones de la Fiscalía a cuenta de no investigar la acción del Gobierno en la pandemia!

José Luis Martínez Almeida, portavoz nacional del PP: “El Gobierno no tiene interés en saber cuál es el número real de muertos en la pandemia” ¡No tiene sentido oculta la cifra. Los registros del Carlos III  y del INE son claros. Más de 50.000 muertos!

José Luis Ábalos, ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE: “No podemos aventurar una cifra con rigor. En la desescalada no pudimos coordinarnos como hubiéramos querido, había una fuerte oposición” ¡Autocrítica con la boca pequeña. Está algo desdibujado en los últimos tiempos. Le presuponemos en la fontanería, algo en lo que es muy diestro y efectivo!

Donald Trump en el libro “Rabia” que ha publicado Bob Woodward, el Pulitzer que destapó Watergate: “No necesito un Consejo de Seguridad. Solo me necesito a mí mismo” ¡Vaya personaje. Todo un dechado de virtudes. Es autosuficiente. Da miedo!

Jared Kushner, el yerno de Trump en el libro de Woodward: “Mi suegro es un loco, sin dirección, tozudo y manipulador” ¡Palabra de yerno. Veremos cuánto dura en la familia!