VALENCIA. El cartagenero y exministro Eduardo Zaplana ha declarado este martes en el juicio del caso Erial, que se celebra en la Audiencia de Valencia. La investigación lo considera a él y a su círculo más cercano como partícipes de una presunta trama creada para el cobro de comisiones derivadas de la concesión de las Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV), realizadas en 1997 durante la gestión del exjefe del Consell, y del Plan Eólico de la Comunidad Valenciana, puesto en marcha en 2003. El objetivo habría sido desviar esas cantidades al extranjero a través de numerosas sociedades para blanquearlas y, posteriormente, retornarlas a España. En total, ese desvío de dinero se cuantifica en 20,6 millones de euros.
Zaplana, que no ha realizado valoraciones a su llegada a la Ciudad de la Justicia de València, ha sido preguntado por los medios sobre las posibles conformidades de acusados. "El juicio es muy largo", se ha limitado a responder. A la entrada ha tenido un pequeño percance cuando una mujer que aguardaba la cola para acceder por el control de seguridad le ha recriminado que no guardara su turno. "¡Haz la cola! Yo llevo aquí desde las 9.30 horas", le ha espetado.
La sesión ha comenzado con normalidad y se ha iniciado con la petición del abogado del expresidente de la Generalitat de que declaren primero los acusados que hayan suscrito un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, "si es que existen". El representante de Anticorrupción, sin embargo, ha replicado que en el calendario inicial se acordó que fuera primero interrogado Zaplana, por lo que ha interesado que se mantenga así. La Sala le ha indicado a continuación que se sentara a declarar.
El exministro ha comenzado respondiendo a las preguntas del fiscal. Ha expuesto sus relaciones personales con los otros 14 acusados. A su círculo más cercano ha admitido que lo conoce "mucho". Su amistad con Joaquín Barceló, ha señalado, viene desde la infancia; Francisco Grau fue su asesor; Mitsouko Henríquez fue su secretaria particular desde 1991 ininterrumpidamente; y con Juan Francisco García mantuvo una relación política muy cercana.
A Vicente Cotino, sobrino del que fuera director de la Policía Nacional Juan Cotino (fallecido en 2020), lo ha conocido, ha comentado, "muy recientemente". "Lo vi en una ocasión en 2009-2010 y lo he tratado a partir de 2019, cuando salí de prisión", ha señalado. A Juan Cotino también ha indicado que lo conoció bastante del ámbito político.
Sin embargo, ha negado que mantuviera con ninguno de ellos relaciones comerciales o societarias como figura en la investigación más allá de las laborales y personales.
Zaplana también ha asegurado que desconoce todo el entramado societario que, de acuerdo con la causa, manejaba él en la sombra. Medlevante, Gesedesarrollos, Turnis, Imison, Fenix Investmentes, Impega... de todas ellas ha sabido a través del sumario, según ha remarcado.
El papel en su poder
El fiscal le ha exhibido entonces un papel encontrado en un registro de su vivienda de Pascual y Genís en 2018 en el que figuraban algunas de esas sociedades que habrían servido para el desvío de fondos de las comisiones. Se trataba, concretamente, de un documento que describía el proceso del retorno de dinero desde Imison Internacional, la empresa matriz de toda la red. Constituida y gestionada por Beatriz García Paesa, la sobrina del espía Francisco Paesa, la investigación apunta a que para su creación Juan Cotino entregó 640.000 euros en efectivo.
En el citado papel constaban también las inversiones hechas y que se iban a hacer a través de las mercantiles creadas por sus presuntos testaferros para el uso de las cantidades en efectivo o para realizar inversiones inmobiliarias en la Marina a través de Medlevante, Costera del Glorio y Gesdesarrollos.
Zaplana ha admitido que ese papel se lo entregó Francisco Grau para informarse de esas sociedades porque estaba intermediando en unos negocios a petición de Joaquín Barceló. "Pedí estos datos por ignorancia del asunto del que iba a intermediar. No conocía las sociedades", ha dicho. Preguntado con quién iba a cerrar el negocio, ha contestado que con un empresario con el que ha tenido relaciones "durante mucho tiempo" pero que no recordaba su nombre.
Aun así, ha hecho hincapié de nuevo en que nunca ha tenido conocimiento de la constitución o funcionamiento de dichas sociedades. "Es imposible pensar que yo conocía todo lo que se describe en el sumario cuando en 2018 (cuando ya estaba en marcha la investigación de Erial) me tuvieron que dar toda la explicación pormenorizada en ese documento", ha explicado.
El exministro ha destacado asimismo que no conoce a Beatriz García Paesa y que Fernando Belhot, su considerado testaferro, "nunca ha gestionado" patrimonio suyo. "A Belhot sí lo conozco. Era una persona muy conocida en Madrid, hasta donde yo sé se dedicaba a los negocios. Me propuso varias operaciones que nunca fructificaron, hemos tenido relaciones en el ámbito político de Uruguay, trajo a algún conferenciante al Club Siglo XXI que yo presidía y coincidimos en Argentina con el candidato derrotado por Milei", ha comentado.
Se desvincula de las adjudicaciones públicas
Zaplana ha relatado que impulsó cuando era presidente de la Generalitat la privatización de determinados servicios, entre ellos las ITV. Para ello sacaron un concurso público. La concesión a una empresa, ha dicho, fue aprobada por una comisión donde hay unos procedimientos reglados y él no estuvo "al tanto de nada". En cuanto a la sociedad que se llevó el Plan Eólico, ha reiterado que sabe "lo que aparece en el sumario". "No me dedicaba a averiguar las empresas adjudicatarias de los concursos públicos", ha insistido.
Sobre las cantidades en el extranjero, ha afirmado que "jamás" propuso a Joaquín Barceló que se las gestionara porque "nunca" ha tenido "dinero fuera de España".