MURCIA. Viva in vitro, la empresa biotecnológica liderada por el científico de proyección internacional Pablo Pelegrín, ha inaugurado este viernes su sede y laboratorios en el Parque Científico de Murcia, desde donde espera continuar creciendo y ya plantea una nueva ronda de financiación que toque la puerta de fondos especializados en el sector sanitario.
Esta compañía ya puso en marcha en abril el plan para entrar a trabajar en este nuevo espacio donde podría contar con su propio laboratorio especializado. De esta forma, logrará acelerar las pruebas y los ensayos para el desarrollo del prototipo de su dispositivo de diagnóstico de la sepsis, el principal objetivo en estos momentos de la compañía. De acuerdo con los cálculos de Viva in Vitro, este prototipo podría estar acabado antes de que concluya este 2023.
Además del laboratorio en sí-que cuenta con 85 metros cuadrados y está muy especializado-, Viva in Vitro contará con unas oficinas y un espacio para cultivo, con lo que podrá avanzar más fácilmente en su investigación. Para ello, el equipo -compuesto en estos momentos por seis personas- realizará distintas pruebas y desarrollos biotecnológicos relacionados con un ensayo inmunocromatográfico.
Aunque las instalaciones han sido estrenadas este viernes, esta compañía ya realizó en abril el traslado de su sede social, tal y como consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil. Sin embargo, han sido necesarios estos tres meses para equipar el laboratorio para habilitar que se encuentre plenamente operativo.
En el último año, Viva in vitro ha realizado dos ampliaciones de capital, gracias al respaldo de inversores privados altamente cualificados, por valor de 1,2 millones de euros, dentro de un plan financiero diseñado ex profeso para ese desarrollo y el equipamiento especializado necesario.
Según su CEO, Joaquín Gómez Moya, “la empresa se plantea una posible ampliación de la mano de fondos de capital riesgo especialistas, españoles, europeos o israelíes, para incorporar talento a su dirección con contactos amplios y conocimientos en operaciones corporativas, para mejorar su gobernanza y para ganar fuerza de negociación frente a las grandes corporaciones que la están contactando”.
Los directivos y el equipo técnico de Viva han explicado los avances específicos en microfluídica y en detección de formas muy específicas del biomarcador NLRP3. Se trata de un complejo molecular que interviene en los mecanismos de acción relacionados con diversas reacciones inflamatorias y procesos en enfermedades, que pueden llegar a ser graves y despierta un gran interés en la industria farmacéutica y la comunidad del capital riesgo especializado en biotecnología y salud. A continuación, han mostrado ejemplos con demostraciones en la zona de laboratorio de la nueva sede de Viva in vitro.
“El desarrollo de biomarcadores funcionales basados en los complejos macromoleculares de NLRP3 supone un gran avance para el diagnóstico y pronóstico de distintas enfermedades. Para la sepsis nos permite realizar un pronóstico personalizado que antes era imposible e iniciar tratamientos tempranos encaminados a modular la respuesta del sistema inmunitario. Esto ha sido posible gracias a que llevamos más de 10 años de investigación sobre los mecanismos moleculares de la inflamación y estudiando cómo estos se modulan en distintas enfermedades”, ha asegurado el doctor Pablo Pelegrín.
El propósito de la startup es doble: por un lado consiste en reducir la muerte por sepsis, proporcionando un diagnóstico preciso de la evolución del paciente, capaz de reducir la mortalidad en hospitales por este tipo de reacción inflamatoria exacerbada. Y por otro lado su propósito reside en poder anticiparse y adoptar las medidas y tratamiento adecuados al estado del sistema inmune del paciente. Es ahí donde desempeña un papel fundamental el biomarcador desarrollado por Viva in vitro.
“En el curso del desarrollo del dispositivo nos hemos percatado de que podemos ir más allá. La industria farmacéutica está interesada en la técnica sencilla, barata y escalable que estamos desarrollando, puesto que les facilitaría el desarrollo de nuevas terapias en numerosas indicaciones. Por supuesto, nuestro equipo ya está trabajando en su protección legal, en los aspectos regulatorios y en los estudios que orienten la mejor estrategia de acceso a un mercado tan complejo como el sanitario”, ha destacado el CEO de Viva in vitro, Joaquín Gómez Moya.
En palabras del director del INFO, Joaquín Gómez, “Viva in vitro es un claro ejemplo del potencial que existe en la Región de Murcia en el sector biotecnológico. Estoy convencido de que en el futuro hablaremos de ello como un caso de éxito a nivel internacional, gracias al haber sabido trasladar al mercado una solución a un problema global”.
Han asistido a la inauguración el rector de la Universidad de Murcia, José Luján y el director del INFO, Joaquín Gómez, que han acompañado a los miembros de Viva in vitro, entre los que se encontraban su CEO, Joaquín Gómez Moya y Pablo Pelegrín, director científico del IMIB, así como el Pablo Ramírez, director científico del IMIB y la directora de la Fundación para la Formación e Investigación Sanitarias (FFIS), Fuensanta Martínez. El acto ha contado también con la intervención de Jesús Cañavate, director general de Planificación, Investigación, Farmacia y Atención al Ciudadano de la Consejería de Salud del Gobierno de la Región de Murcia.
Los últimos informes publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), señalan que, debido a la sepsis o septicemia, cada año mueren 11 millones de personas, entre ellas muchos niños. La OMS asegura además que, casi la mitad de los 49 millones de casos de septicemia anuales en todo el mundo ocurren en niños, con 2,9 millones de muertes que podrían evitarse, en su mayoría, mediante un diagnóstico temprano y una atención clínica y cuidados adecuados.
